Marisol Navajas
Todo ello regado con un vino retsina y de postre por qué no un helado de yogur griego o un café y un outzo para rematar una buena comida
Unos entremeses variados a base de salziki, humus y otras delicias de las tierras griegas son el mejor inicio para sentirse como en ese maravilloso país.
Después una musaka vegetariana o con carne, según se prefiera, o un gyros excelente, como en Atenas o en Creta, de donde el restaurante toma su nombre: el cretense.
Todo ello regado con un vino retsina y de postre por qué no un helado de yogur griego o un café y un outzo para rematar una buena comida.