Restaurante Café de la Villa

Supongo que habrán cambiado de dueño desde el comentario anterior, porque lo que vivimos mis amigas y yo el domingo no tiene nombre.
Nos sentamos pedimos la carta, y todo lo que íbamos diciendo no tenían, la excusa del camarero, que se había acabado todo el sábado, y q no había sitio donde comprar nada siendo Domingo. Pudimospedir unas patatas bravas, unos huevos estrellados y unas croquetas, eso eran las 3:30 de la tarde, pues bien empieza a pensar el tiempo media hora, preguntamos que nuestras raciones se las han puesto a los de la mesa de al lado que se ha equivocado , el otro camarero, pero que nos lo hacen enseguida, 4.30 de la tarde llegan con un minúsculo plato de patatas, y sin cubiertos ni pan, preguntamos por el resto q enseguida viene, tenemos q pasar a dentro a pedir los cubiertos y el pan, 5 de la tarde pedimos la cuenta, y alos 5 minutos aparecen el resto de las raciones, 8 patatas con dos huevos duros y dos lonchas rancias de jamón y 5 "croquetas", en fin, que yo de vosotros no me arriesgaria a que me estropearan una tarde de tapeo, y por esa desagradable velada 45 euros....

No falla nunca. Casi todos los establecimientos que tienen como monopolio la cerveza Estrella Damm, siempre, siempre, descuidan la calidad, la limpieza, etc.

Debe ser que quieren tanto abaratar sus costes que les importa poco los otros factores y los clientes, claro.
Antonio Jaen