Para acercarse a este mercado de antiguedades, basta abandonar el Palacio de Diocleciano por la purta de Oro y subir las escaleras hacia el Parque de Strosmajerov. Allí el visitante encontrará un montón de puestos con artículos bastante interesantes, que pueden ir desde escafandras, a joyería, pasando por objetos de las guerras o decorativos. Un lugar al que ir con hueco en la maleta y dinero en el bolsillo.