En la ruta entre Los Angeles y Las Vegas, a dos horas de Los Angeles (200 kilómetros), cerca de Barstow, a las puertas del desierto de Mojave, se puede v hisitar un histórico pueblo minero que en la actualidad se ha transformado en un “pueblo fantasma” convertido en una atracción turística.
El original pueblo de Calico fue creado en 1881, tras la aparición de unas minas de plata. Llegó a tener 1.200 habitantes
En 1951 un ex-minero, Walter Knott (creador del parque temático Knotts Berry farm, del cuál hago otro rincón), compró el pueblo, lo reconstruyó y lo convirtió en atracción turística. De hecho, en 1966 fué cedido al Condado de San Bernardino y pasó a ser considerado como un parque regional.
El calor es de puro desierto, no olvideis llevaros agua en la visita. Hay un parking en la entrada y la visita es de 1 o 2 horas. Recomiendo que entreis en los túneles mineros.
En Calico sólo un tercio de los 30 edificios de madera son originales. El resto han sido reconstruidos