Drøbak

Bonito lugar por sus paisajes. El pueblo en si es muy acogedor y extenso, con callejuelas y casas muy cuidadas y casi de cuento. Es un pueblo tipico para pasar las vacaciones la gente de Noruega, especialmente la gente de Oslo.

Como curiosidad tiene un barco alemán de la Segunda Guerra Mundial hundido enfrente del pueblo.

Recomendable si se busca paz y tranquilidad, aunque hay algun bar/restaurante para tomar copas (en esto es especialmente caro este pais).

Divertido lugar para aprovechar los días de calor y tirarse de sus trampolines para diferente grados de valentía .
Praderas verdes para los que prefiramos tomar el sol.
Después aprovechar para ver el bonito pueblo de Drovak.

La casa de Papá Noel llama la atención, pero lo más recomendable es la visita por sus calles y las increíbles vistas al fiordo