La ciudad castellana de Zamora, de orígenes románicos, cuenta con un importante patrimonio histórico que atrae cada año a cientos de turistas. Su casco antiguo ha sido considerado Conjunto Histórico-Artístico por su gran contribución monumental, circundada por las Murallas de Zamora, uno de los símbolos de la ciudad. El riquísimo patrimonio arquitectónico es el motivo por el que muchos turistas deciden visitar Zamora, sobre todo durante su Semana Santa, declarada Interés Turístico Internacional y Bien de Interés Cultural.
Los vestigios del pasado se reflejan en el casco histórico de Zamora, donde debes visitar la emblemática Catedral de Zamora, considerada Monumento Nacional desde 1889. Este majestuoso templo de estilo románico es el orgullo de la comunidad, y uno de los puntos de interés más importante de la ciudad. También puedes conocer Zamora visitando otros templos religiosos que datan de los siglos XI al XIII, como la Iglesia de San Pedro o la Iglesia de San Ildefonso. Especial mención merece el Castillo de Zamora, una imponente fortificación de estilo románico.
Cuando viajes a Zamora también podrás disfrutar de los diversos museos y teatros, así como de parques y jardines, además de hacer excursiones en barco por el Duero.
Una de las mejores ocasiones para viajar a Zamora es durante la celebración de la Semana Santa, fiesta de Interés Turístico Internacional, que transforma la ciudad en un verdadero reducto sacro. El turismo en Zamora se concentra sobre todo en la época estival, donde se puede recorrer la ciudad guiado por las leyendas medievales del Romancero, escenificadas en los rincones con más encanto de la ciudad.