Juan Quintana
Conveniente, buen servicio y barato
Decoración muy escocesa, ambiente tranquilo a pesar de estar en pleno centro y con una buena separación entre los que supone el bar, de la cafetería y del restaurante, The Fountain o la fuente es un lugar ideal para tomar algo ligero, o no tan ligero, pero sobre todo para ir con niños.
Con varios platos típicos de la zona, como el cock-a-leekie (sopa de puerros y patatas que aparece en imagen) nos llamó y mucho la atención de los precios, muy a la baja para ser Agosto y pensamos que afectaría a la calidad ... mal supuesto. Sin ser una comida de "gourmet de altos vuelos" pero si resultó casera, bien cocinada y con buena presentación.
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