Recuerdos en tinta de la Plaza Santa María . Hay que mirar al futuro sin olvidar de donde venimos y recordar la belleza que poseímos. Quien olvida su pasado se empobrece. La memoria tiene que reivindicarse
La Catedral de siempre realzada en su proporción por la nueva adecuación del entorno. Belleza en cada uno de sus ángulos guardando el Casco Antiguo de la ciudad. En sus alrededores, callejones estrechos, como si todos de acuerdo no quisieran robar un centímetro de protagonismo a la majestuosidad de la arquitectura.