Hotel Selid

Ha sido un grato descubrimiento el tema de los alojamientos en Islandia, hay que alejarse de los hoteles convencionales que son pocos, caros, y más aburridos.

Esta granja fue otra grata sorpresa después de seguir un camino solitario en terreno inhóspito.

Es una granja con ocho habitaciones, junto a un río, y con una decoración de lo más acogedora y cuidada, además con un buen cocinero.

Hay wifi y todas las comodidades, hay que descalzarse dentro, como en todos estos lugares que parecen ser la casa de alguien, y tiene un jacuzzi fuera que puedes probar si avisas antes,