Sabores, aromas y tradiciones del vino mexicano Casa Madero, por ana schwarz Casa Madero es un emblemático destino en Parras de la Fuente, Coahuila, que combina tradición, encanto y magia. Esta hacienda, conocida localmente como Casa Grande, es la más antigua en vitivinicultura en América y se encuentra en uno de los 25 Pueblos Mágicos de México . La viajera ana schwarz destaca que es un lugar que invita a descansar o celebrar, con un servicio excepcional de hotel que requiere la reserva de sus 24 habitaciones por un mínimo de tres días, ideal para bodas y eventos familiares.
Los visitantes pueden disfrutar de un recorrido guiado por sus viñedos y la vitivinícola, donde se produce vino de excelente calidad . Edna Enríquez menciona que es fundamental hacer una parada en Casa Madero antes de llegar al pueblo mágico, sugiriendo probar el vino 3, conocido por su sabor único. Los jardines son verdaderamente hermosos y aportan a la belleza general del lugar, como señala la viajera Nycole Ayala . Además, la vegetación exuberante y el buen vino hacen de este sitio un destino imperdible, como opina Juan Martinez Flores . Sin duda, Casa Madero es un rincón que vale la pena conocer en Parras de la Fuente.
Bodegas El Perote, por Diana Patricia Montemayor Flores Bodegas El Perote se sitúa en el corazón de la antigua Hacienda El Perote, ofreciendo a los visitantes una auténtica experiencia vitivinícola . Según Diana Patricia Montemayor Flores , la bodega permite a los huéspedes “catat los vinos y aguardientes elaborados con procedimientos ancestrales”. La visita es gratuita y brinda acceso a las barricas que resguardan el vino, así como a impresionantes instrumentos antiguos utilizados para la molienda de la uva, sumergiendo a los visitantes en la rica historia del lugar .
Marcela Aguirre destaca la belleza del lugar, mencionando que “estuve hospedada en esta antigua hacienda y es muy bonita”. Los amplios cuartos y la amabilidad del personal del restaurante contribuyen al encanto de la experiencia. La cercanía con la bodega de vinos añade un valor adicional a la estancia, convirtiendo la visita en una actividad recomendable para todos. Bodegas El Perote es una parada imperdible para quienes buscan disfrutar de la cultura del vino en un entorno histórico y acogedor.
Tour por Casa Madero, por Diana Patricia Montemayor Flores Visitar Casa Madero en Parras de la Fuente es una experiencia fundamental para entender la riqueza vitivinícola de México. Fundada en 1597, esta empresa no solo es la principal productora de vino del país, sino que también sostiene la economía local. El recorrido guiado dura aproximadamente 45 minutos y tiene un costo de 30 pesos, lo que lo convierte en una opción accesible y enriquecedora.
El viajero Diana Patricia Montemayor Flores describe el tour como una inmersión en la historia del vino, donde «el olor del vino que se fermenta se mezcla con el relato de la producción» mientras se camina entre vides y barracas antiguas. Por otro lado, Fernando Sánchez de la Torre destaca la importancia del conocimiento adquirido, mencionando que es un «excelente tour» para aprender sobre la historia de la ciudad y el proceso de fabricación del vino. Aunque no se incluye una cata gratuita, el costo de 200 pesos por una cata con copa de regalo es una opción viable para los aficionados al vino. Sin duda, Casa Madero es un lugar que no debe faltar en tu visita a Parras de la Fuente.
Vinícola Márqués de Agueyo, por Diana Patricia Montemayor Flores La vinícola Márqués de Aguayo , considerada la primera bodega comercial de México , fue fundada en 1593 por Francisco de Urdiñola. Esta emblemática construcción, que refleja la rica historia vitivinícola del país, se encuentra actualmente en un estado de abandono . Sin embargo, se avecinan grandes cambios, ya que se planea revitalizarla. Diana Patricia Montemayor Flores destaca que la vinícola «será solo por poco tiempo» un lugar olvidado, ya que se prevé que se convierta en un hotel boutique que preservará la esencia de la antigua hacienda.
Ubicada en Parras de la Fuente, esta vinícola no solo encierra historias del pasado, sino que también se asienta en un entorno pintoresco y atractivo , como comenta Juan Martinez Flores sobre el lugar: «Parras coah. Lugar pintoresco y bonito». La vinícola Márqués de Aguayo es un destino que ofrece una conexión única con la tradición vitivinícola de México , y su futuro promete transformaciones fascinantes que harán brillar este rincón histórico de Parras. Este es un lugar que los viajeros no deben dejar de visitar, tanto por su valor histórico como por las experiencias que se avecinan .
Bodegas Segovia Fuantos, por Fernando Sánchez de la Torre Bodegas Segovia Fuantos es una joya escondida en Parras de la Fuente que ofrece una experiencia única para los amantes del vino . Fernando Sánchez de la Torre destaca su naturaleza artesanal, mencionando que «está un poco escondido en una plaza de Parras». Sin embargo, la búsqueda vale la pena, ya que en este lugar se elaboran vinos que deleitan a los paladares más exigentes. Sus vinos tintos dulces y el vino oporto han recibido halagos de quienes los han probado, considerándolos «muy buenos».
Además de sus vinos, los visitantes también pueden disfrutar de un licor de nuez que se describe como «excelente». En su última visita, Fernando tuvo la grata sorpresa de encontrar chorizo casero de gran calidad, lo que resalta la variedad de productos que se pueden degustar en la bodega. La combinación de un entorno acogedor, vinos excepcionales y productos locales convierte a Bodegas Segovia Fuantos en una parada imperdible para quienes visitan Parras.
Paseos por el corazón de Parras de la Fuente Parras de La Fuente, por Javier Carrera Parras de la Fuente es un pueblo mágico que encanta a los visitantes por su historia y su entorno natural. «Este pueblo antiguo y pequeño es el municipio más grande de todo el estado de Coahuila» comparte Javier Carrera , quien destaca la belleza de los parrales y nogales que adornan el camino hacia el destino. Al caminar por sus calles, se pueden admirar casonas históricas que cuentan la rica historia del lugar.
Una visita obligada es la capilla del Santo Madero , situada en lo alto de un matacán, donde los visitantes pueden admirar retablos antiguos. La viajera Rakel Gueri describe su experiencia familiar diciendo que disfrutaron «la caminata, nadada y paseada por el reconocido ‘pueblo mágico'». Los dulces regionales son otro atractivo, perfectos para disfrutar bajo la sombra de los nogales.
El vino es parte esencial de la cultura local. La Casa Madero es la principal productora, ofreciendo recorridos que permiten conocer el proceso de elaboración del vino, «un recorrido inolvidable», según Javier. Durante la feria de la Uva en agosto, el pueblo se llena de vida con desfiles y festejos, convirtiendo a Parras de la Fuente en un destino perfecto para disfrutar de la cultura y la historia coahuilense.
La Plaza del Beso, por Diana Patricia Montemayor Flores La Plaza del Beso es un lugar encantador y de gran significado en Parras de la Fuente, situado justo detrás de la Iglesia de Santa María de las Parras. Este espacio, cuidadosamente conservado, debe su nombre a su diseño original, que permitía que los arbustos cubrieran a los novios que se citaban en el centro de la plaza. Diana Patricia Montemayor Flores destaca que en este punto «los lugareños disfrutan las horas del atardecer sentados en las bancas», lo que añade un aire acogedor y comunitario al lugar.
El ambiente en la plaza es animado y ofrece una variedad de atracciones. Fernando Sánchez de la Torre menciona que es un «bonita plaza en el centro de la ciudad» donde se pueden probar deliciosas nieves de yogurt , además de contar con un mercadillo donde es posible adquirir productos locales como mezclilla, nueces y vino. Sin duda, La Plaza del Beso es un espacio ideal para disfrutar tanto de la tradición local como de la sociabilidad de sus habitantes, convirtiéndola en una visita imprescindible para quienes exploran Parras de la Fuente.
Palacio Municipal, por Diana Patricia Montemayor Flores El Palacio Municipal de Parras de la Fuente es una joya arquitectónica que destaca por su elegante diseño afrancesado . Esta impresionante construcción, de cantera rosa, recuerda al emblemático palacio de Saltillo, la capital del estado de Coahuila. Frente a él se extiende la plaza de armas , rodeada de la vibrante vida local y de la imponente iglesia, creando un ambiente perfecto para disfrutar de la cultura y la historia de la región.
Los viajeros que han visitado el lugar subrayan su belleza y cuidado. Diana Patricia Montemayor Flores comenta que «es inevitable detenerte un momento para admirarlo», destacando los detalles como las columnas dóricas y los ventanales que aportan un toque distintivo al edificio. Por su parte, jean monroy comparte que es «muy linda y bien cuidada», lo que refleja el esfuerzo por conservar este importante patrimonio.
Visitar el Palacio Municipal es una experiencia que no te puedes perder al explorar Parras de la Fuente, un sitio que combina historia, arquitectura y un entorno acogedor.
Plaza del Reloj, por Diana Patricia Montemayor Flores La Plaza del Reloj es un lugar emblemático que se sitúa en el corazón de Parras de la Fuente . Esta plaza, reconocida por su imponente torre con un reloj visible desde todos sus ángulos, fue erigida en honor a los héroes de la Revolución , específicamente el día en que se recibió la noticia de la muerte de Francisco I Madero, un hijo ilustre de este lugar. La viajera Diana Patricia Montemayor Flores destaca su belleza al mencionar que «la torre, adornada con motivos revolucionarios, constituye el lugar de reunión de lugareños y visitantes».
Además de ser un punto de encuentro social , la plaza aloja numerosas actividades. Desde aquí, se puede abordar el tranvía que ofrece recorridos por la ciudad , lo que añade un valor turístico aún mayor. Diana Patricia también aconseja disfrutar de los productos artesanales que se venden en sus alrededores: «resulta interesante recorrerla y sentarte al lado del reloj, a tomarte una nieve». Este espacio no solo embellece el paisaje urbano, sino que también invita a la interacción y a descubrir la cultura local a través de sus artesanías y delicias culinarias. La Plaza del Reloj es, sin duda, un destino imperdible en Parras de la Fuente.
City Tour en Parras de la Fuente, por Diana Patricia Montemayor Flores El city tour en Parras de la Fuente es una experiencia única que permite a los visitantes explorar el encanto de este pintoresco pueblo. El recorrido inicia en la Plaza del Reloj y se realiza en un antiguo vagón de tranvía adaptado, con un costo accesible de 30 pesos mexicanos y una duración aproximada de 45 minutos. La viajera Diana Patricia Montemayor Flores menciona que «los guías son dos profesores que van narrando la historia y el acontecer de los puntos más importantes del lugar». Esta narrativa no solo enriquece el paseo, sino que también ofrece una visión general de los atractivos turísticos que se pueden disfrutar en Parras.
El clima templado de la región hace que el tour sea especialmente placentero, especialmente por las tardes. Como indica la viajera, «en realidad pasas un momento agradable, el clima de Parras es templado, por lo menos menos cálido que en Monterrey». Este city tour se convierte así en una opción ideal para quienes deseen conocer más sobre la cultura, historia y belleza de Parras de la Fuente en un entorno divertido y ameno.
Fiestas y vendimias con sabor a celebración Fiesta de la Vendimia, por Diana Patricia Montemayor Flores La Fiesta de la Vendimia en Parras de la Fuente es una celebración emblemática que se lleva a cabo el primer sábado de agosto y se extiende por 15 días. Este evento tiene sus raíces en antiguas tradiciones, donde los dueños de las haciendas se reunían con sus trabajadores para pedir la bendición del santo patrono para una buena cosecha. Diana Patricia Montemayor Flores destaca que «hoy en día, la fiesta de la vendimia de Parras de la Fuente es el evento más importante del año». La celebración comienza de forma espectacular con la entrada triunfal de charros, escaramuzas y una carreta que lleva a la reina de la fiesta, seguida por calesas adornadas con pequeñas viñadoras portando canastas de uvas.
La festividad incluye una misa donde se bendice la cosecha, y culmina con la tradicional molienda de las uvas a la manera de los antiguos. Los visitantes pueden disfrutar de una amplia variedad de comidas típicas y degustar los premiados vinos y aguardientes de Casa Madero. Juan Martinez Flores resalta que «hay grupos regionales y del país que contribuyen al ambiente festivo». Este evento no solo celebra la cultura vitivinícola, sino que también genera un impacto positivo en la economía local . La Fiesta de la Vendimia es, sin duda, una experiencia imperdible para quienes buscan sumergirse en la tradición y el sabor de la región.
Víspera de la Fiesta de la Vendimia, por Diana Patricia Montemayor Flores La Víspera de la Fiesta de la Vendimia es un evento que marca el inicio de una de las celebraciones más esperadas en Parras de la Fuente. Diana Patricia Montemayor Flores comparte su experiencia al describir cómo «la víspera de la Fiesta de la Vendimia inicia la noche previa con la participación de grupos de matachines » que bailan en el atrio de la Iglesia de San Lorenzo. Este ambiente festivo atrae a miles de visitantes, quienes se unen para celebrar una tradición que tiene siglos de historia, originalmente dedicada a los trabajadores de las viñas y sus familias.
Los viajeros destacan la impresionante ceremonia que se lleva a cabo al caer la noche, donde los matachines se dirigen a una de las colinas cercanas para realizar rituales religiosos. Allí, «prenden una fogata, hacen explotar fuegos artificiales y bajan a velocidad portando antorchas». Esta mezcla de luces y danzas genera un ambiente mágico, con una «columna de fuego que baja por la montaña», llevando consigo el espíritu festivo que culminará en la Gran Fiesta de la Vendimia . La celebración promete continuas degustaciones de vino, aguardiente y brandy de Casa Madero, asegurando que la noche esté llena de alegría y tradición.
Vendimia en La Plaza del Reloj, por Diana Patricia Montemayor Flores La Plaza del Reloj en Parras de la Fuente es un punto de encuentro vibrante y lleno de vida. Desde temprano, los vendedores comienzan a llegar, ofreciendo una variedad de artesanías y delicias culinarias . Una viajera menciona que aquí se pueden encontrar «nieve de Oaxaca; mole negro; pulseras con las piezas más ingeniosas que te puedas imaginar» además de otras maravillas. Este espacio no solo es ideal para admirar la creatividad local, sino también para descansar bajo la sombra de sus árboles mientras planeas un recorrido por el pueblo en tranvía, cuya salida se encuentra justo en la plaza.
Los productos que se ofrecen son verdaderas obras de arte. Los visitantes pueden disfrutar de «colibríes, sirenas y quetzales finamente elaborados en base a chaquira», así como una fascinante variedad de colmillos, garras, piedras y blusas bordadas. La Plaza del Reloj se convierte así en un escaparate no solo de compras, sino de una rica expresión cultural donde cada pieza cuenta una historia, vendida por los mismos artistas que las crean. Sin duda, es un lugar imperdible para quienes buscan experimentar la esencia auténtica de Parras de la Fuente.
Desfile de la Vendimia, por Diana Patricia Montemayor Flores El Desfile de la Vendimia en Parras de la Fuente es una celebración que reúne a la comunidad y a turistas de diversas regiones. Esta festividad, que tiene más de un siglo de historia, marca el inicio de la cosecha de uvas y la venta del vino. Diana Patricia Montemayor Flores nos comenta que el desfile «parte del centro del pueblo y se dirige a Casa Madero «, la vinatería más emblemática de la región.
Durante el evento, el ambiente se llena de color y tradición. Los participantes, principalmente jóvenes y niños, desfilan montados en caballos. «Las niñas van vestidas de escaramuza y los jóvenes de charros», lo que resalta la cultura mexicana . Además, algunas viñadoras llevan canastas con uvas y viajan en calecitas, añadiendo un toque pintoresco a la celebración.
La comunidad se congrega para disfrutar de esta fiesta y abrir paso al desfile, que culmina en el parador turístico del pueblo. Una experiencia que, sin duda, capta la esencia de la tradición vinícola de Parras de la Fuente y ofrece un día lleno de alegría y camaradería en honor a la uva.
Jardines, estanques y paisajes naturales Estanque La Luz, por Diana Patricia Montemayor Flores Estanque La Luz es un lugar emblemático en Parras de la Fuente con una rica historia que se remonta al siglo XIX. Originalmente conocido como Estanque Lobatón, este sitio fue clave en el desarrollo de la energía eléctrica en América Latina. Diana Patricia Montemayor Flores menciona que «Parras de la Fuente, Coahuila, fue el primer pueblo de todo el continente americano en donde se encendió por primera vez un foco eléctrico». Este suceso histórico fue posible gracias a la colaboración entre Don Evaristo Madero y Thomas Alva Edison.
El estanque, formado por un manantial de aguas claras, se ha convertido en un popular balneario donde los visitantes disfrutan de un buen chapuzón. Juan Martinez Flores resalta que es «ideal para nadar y comer», y aunque Meche Aguilera Romano aclara que la luz eléctrica no se instaló inicialmente para el pueblo, gracias a los primos Chapman, Parras recibió su primera energía eléctrica.
Sin embargo, no todo es perfecto. Erika Moreno menciona que, aunque el lugar tiene su encanto, «las instalaciones no son tan cómodas como parecen» y que el agua puede estar un poco descuidada. A pesar de esto, Estanque La Luz sigue siendo un punto de reunión familiar donde se puede disfrutar de un día al aire libre asando carne y admirando la belleza del entorno.
Canon de la Lima, por Yesenia Cañón de la Lima es un fascinante destino en Parras de la Fuente que ofrece una combinación perfecta de aventura y naturaleza . Este cañón estrecho es ideal para quienes buscan sumergirse en actividades como el cañonismo y el trekking. Los viajeros han destacado que es un lugar donde se pueden observar serpientes y otros reptiles, lo que aporta una dosis de emoción al recorrido. Alfonso Mireles menciona que ha realizado esta actividad en varias ocasiones y asegura que «es un cañón estrecho donde puedes practicar cañonismo intermedio».
Para aquellos que deseen explorar el cañón , contar con un guía es altamente recomendable. Yesenia resalta que, aunque es posible acceder por cuenta propia, es mejor ir con alguien experimentado porque «sabe por los animales y las maneras de manejar la ruta». Esto asegura no solo una experiencia más segura, sino también la oportunidad de disfrutar plenamente de la belleza del entorno sin preocupaciones. Cañón de la Lima se presenta como una experiencia imperdible que promete aventuras inolvidables en medio de impresionantes paisajes.
Alameda de Parras, por Diana Patricia Montemayor Flores La Alameda de Parras es un rincón encantador que representa el corazón del pueblo, donde la naturaleza y la familia se entrelazan en un ambiente de paz . Como describe Diana Patricia Montemayor Flores , «la Alameda de Parras, situada en el centro, constituye el paseo familiar institucional». Este espacio se caracteriza por su impresionante verdor, donde una diversidad de árboles y plantas crean un oasis natural que invita a disfrutar de sus amplias y largas banquetas. Los visitantes pueden relajar sus pensamientos mientras caminan bajo la sombra de nogales, álamos y enredaderas, todo rodeado por los agradables trinos de los cientos de pájaros que habitan el lugar.
Este entorno es ideal para quienes buscan un momento de esparcimiento en familia. La Alameda es más que un simple parque; es un lugar donde la comunidad se une, haciendo de cada visita una experiencia inolvidable . Ven a descubrir este espacio lleno de vida, donde cada rincón ofrece la posibilidad de una nueva conexión con la naturaleza y con los seres queridos.
Iglesias y arte sacro en Parras Capilla del Santo Madero,, por Alfonso Mireles La Capilla del Santo Madero , situada en la cima de una colina, ofrece a sus visitantes una de las vistas más impresionantes de Parras de la Fuente. La caminata hacia el templo puede ser desafiante, pero como menciona un viajero, «la vista es muy buena»; al llegar a la cima, se puede disfrutar de un panorama que abarca gran parte del desierto de Coahuila. La capilla, aunque pequeña, cautiva por su belleza y su historia, evocando comparaciones con icónicas construcciones en el extranjero. Según otro visitante, «desde arriba obtienes la mejor vista de la ciudad «.
Los relatos sobre la capilla también revelan que es un lugar de interés para aquellos que buscan un toque de romanticismo, pues se dice que está dedicada a ayudar a las niñas en su búsqueda del amor. Aunque el ascenso puede ser pesado, cada paso vale la pena, ya que el paisaje que se despliega al final del recorrido es verdaderamente relajante. Sin olvidarlo, es importante tener en cuenta que la iglesia permanece cerrada los miércoles, lo que podría afectar los planes de algunas personas que desean visitarla. Una vez en la cima, muchos cautivados exclaman: «enamorado de la vista», reflejando la magia del lugar.
Iglesia de Casa Madero, por Daniela VILLARREAL La Iglesia de Casa Madero , ubicada en Parras de la Fuente, es un encantador templo que refleja la rica historia de esta región en el norte de México. Este colorido edificio se sitúa en la entrada de la reconocida finca de vino Casa Madero, y destaca por su apertura al público, permitiendo que los visitantes se maravillen con su estructura única adornada por «cuerdas» de colores cálidos en el techo.
La iglesia tiene una significativa relevancia cultural y religiosa en la historia del lugar. Juan Martinez Flores menciona que su importancia se remonta a los tiempos de la Revolución, cuando los habitantes «aportaron mucha ayuda a los revolucionarios de la época». Esta conexión histórica se entrelaza con la Tradición vinícola de Parras , ya que desde la conquista española, la región es famosa por su vino, que, como señala Daniela VILLARREAL , «sirve la iglesia y cultivos, una vez hechas favorables a los dioses».
Así, la Iglesia de Casa Madero no solo es un sitio de interés arquitectónico, sino también un símbolo de la identidad y la historia de Parras de la Fuente. Su visita se convierte en una experiencia memorable para quienes desean profundizar su conocimiento sobre la cultura local y disfrutar de la belleza de sus alrededores.
Iglesia de San Ignacio de Loyola, por Daniela VILLARREAL La Iglesia de San Ignacio de Loyola , ubicada en Parras de la Fuente, es un sitio emblemático que atrae tanto a los fieles como a los turistas. Este lugar es notable por su fusion de estilos arquitectónicos, donde el colonial se mezcla con el neo-clásico. Según Daniela VILLARREAL , en su entrada «La parroquia de Santa María de las Parras» se destaca un mosaico en su portada que recuerda el acta de fundación de la ciudad, lo que le otorga un valor histórico significativo . La iglesia no solo es un punto de referencia arquitectónico, sino también un centro de fe muy apreciado por los locales. Juan Martinez Flores la describe como un «oasis de Coahuila», reconociendo su importancia como un lugar de motivación y espiritualidad para los habitantes y visitantes del pueblo mágico. La belleza de esta iglesia y su relevancia cultural y religiosa la convierten en una parada imperdible al explorar Parras de la Fuente.
Iglesia del Santo Madero, por Diana Patricia Montemayor Flores La Iglesia del Santo Madero es un emblemático símbolo de Parras de la Fuente, ubicado en un risco que ofrece una vista panorámica fascinante . Según la viajera Diana Patricia Montemayor Flores , «la construcción del recinto se debió a que los jesuitas que llegaron al lugar colocaron una cruz de madera sobre una colina a fin de que pudiera ser vista por los pobladores». Esta situación inicial llevó a la creación de una capilla que resguardara la cruz, comenzando así una historia que hoy atrae a numerosos visitantes.
Acceder a la iglesia es una experiencia en sí misma; una rampa con escalones a la derecha te conduce hasta la base del templo. Posteriormente, una escalera blanca te lleva a la entrada principal, donde te recibe un pequeño recinto centrado en una simple cruz de madera. Como menciona la viajera, «la vista desde la iglesia es impresionante, por un lado las montañas y por otro el valle ocupado por Parras de la Fuente», convirtiendo cada visita en una conexión memorable con la naturaleza y la historia del lugar. Esta iglesia no solo es un punto de interés religioso, sino también un espacio para disfrutar de la belleza que rodea a la localidad.
Capilla de San Lorenzo, por Diana Patricia Montemayor Flores La Capilla de San Lorenzo es un lugar emblemático que forma parte de la historia de la Hacienda San Lorenzo , fundada por Don Lorenzo García. Esta capilla, de estilo arquitectónico sencillo y perfectamente conservada, resalta por su valor histórico vinculado a la ex hacienda, que ahora alberga Casa Madero , una de las principales productoras de vino en México. Diana Patricia Montemayor Flores menciona que «la advocación es por supuesto, San Lorenzo, quien ocupa un lugar especial en el retablo principal», lo que añade un toque espiritual a la visita.
La capilla no solo es un espacio para la adoración, sino también un lugar donde se celebran matrimonios religiosos, lo que refleja su relevancia en la comunidad. Según el viajero, «los días en que es mayormente visitada, es durante la Fiesta de la uva y el vino , que ocurre durante el mes de agosto». Esta festividad atrae a muchos visitantes, quienes buscan disfrutar de la cultura y el ambiente especial que se respira en el lugar. La Capilla de San Lorenzo, así, se presenta como una experiencia imperdible para quienes desean explorar la riqueza histórica y cultural de Parras de la Fuente.
Huella histórica y legado de los Madero Casa de Don Jaime Madero, por Diana Patricia Montemayor Flores La Casa de Don Jaime Madero , conocida por los lugareños como la ex hacienda del Rosario , es un lugar emblemático en Parras de la Fuente que evoca la historia de México . Este sitio fue el hogar del segundo matrimonio de Don Evaristo Madero, conocido como «el patriarca», y de doña Manuela de Farías y Benavides. La estructura, maravillosamente conservada, refleja la arquitectura de su época y se sitúa frente a la gran casa de la hacienda El Rosario, propiedad de Don Evaristo. La viajera Diana Patricia Montemayor Flores dice: «La casa mantiene la estructura de la época «. Aunque actualmente se encuentra vacía, el jardín ofrece un espléndido vistazo a su grandeza. Los visitantes pueden admirarla desde el exterior, compartiendo su historia con la de otros inmuebles significativos de la familia Madero, que fueron testigos del crecimiento de Don Francisco I Madero, presidente de México tras la caída de Porfirio Díaz. Sin duda, la Casa de Don Jaime Madero es una parada imperdible para aquellos que deseen conectarse con el pasado de este significativo pueblo .
Casa natal de Francisco I Madero, por Diana Patricia Montemayor Flores La Casa Natal de Francisco I Madero es un lugar emblemático que rinde homenaje a uno de los pilares de la democracia en México. Situada en lo que alguna vez fue la Hacienda del Rosario , esta edificación es el lugar donde nació el hombre que desafió el régimen de Porfirio Díaz. Diana Patricia Montemayor Flores señala que «es impresionante conocer el lugar donde nació un líder que luchó por la democracia». Aunque la casa es de propiedad familiar y no se puede acceder a su interior, se puede admirar desde el jardín, lo que permite a los visitantes conectarse con la historia de una familia que jugó un papel crucial en la Revolución Mexicana .
Madero, conocido como el primer nieto de Don Evaristo Madero, estudió en Estados Unidos y Francia antes de dedicarse a la política. Su valentía y determinación lo llevaron a encabezar un movimiento que cambiaría el rumbo del país, rasgos destacados por los viajeros que han mencionado que «su historia es un recordatorio de los sacrificios que se hicieron por la libertad». El legado de Madero sigue vivo en este sitio, que invita a reflexionar sobre su vida y sus ideales.
Sala Madero, por Diana Patricia Montemayor Flores La Sala Madero , ubicada en la Casa de la Cultura de Parras de la Fuente , es un espacio que rinde homenaje a Francisco I Madero , el primer presidente que surgió tras el porfiriato y una figura clave en la historia de México. Este recinto, a solo dos cuadras de la Alameda, ofrece un acceso libre, permitiendo a los visitantes explorar la vida de Madero a través de diversas fotografías que retratan sus etapas familiares, profesionales y políticas. Diana Patricia Montemayor Flores destaca que «es muy enternecedor ver imágenes de este hombre generoso, proveniente de una familia más que adinerada», quien dedicó su vida al bienestar de sus compatriotas.
En la sala también se pueden apreciar piezas históricas, como rifles y armas utilizadas en la Revolución, así como una invaluable copia del acta de nacimiento de Madero. La viajera menciona que el lugar presenta “fotografías de revolucionarios , como Zapata y Pancho Villa”, lo que complementa la experiencia de inmersión en esa emocionante época. La Sala Madero es un espacio que invita a la reflexión sobre la vida y legado de un líder visionario , dejando una herencia de orgullo para todos los mexicanos.
Museo de Casa Madero, por Diana Patricia Montemayor Flores El Museo de Casa Madero , una joya en Parras de la Fuente, ofrece una inmersión en la historia del vino y la viticultura. Al visitar este lugar, los viajeros pueden admirar «una muestra representativa de la primera maquinaria utilizada para la molienda de la uva», lo que permite entender el proceso artesanal que dio vida a esta prestigiosa bodega. Los jardines albergan piezas históricas y barriles de madera, que son parte del legado vinícola de la región.
El tour guiado es una experiencia enriquecedora. Uno de los visitantes destaca que «el guía narra de forma interesante la función de las piezas más importantes, así como detalles de la vida de los viñadores y sus familias de ese entonces». Este recorrido no solo ofrece un vistazo a la maquinaria, sino también a la tradición y cultura que rodean la producción de vino en México. Con un costo accesible de diez pesos , es una actividad imperdible para quienes deseen conocer más sobre la rica herencia de la viticultura en Casa Madero.
Barracas de Casa Madero, por Diana Patricia Montemayor Flores Las Barracas de Casa Madero son un rincón histórico que combina tradición y legado. La ex hacienda de San Lorenzo , donde aún se respira la esencia del vino, ofrece a los visitantes una experiencia inolvidable . Diana Patricia Montemayor Flores relata que «aún hoy, la bodega de la ex hacienda de San Lorenzo… está bien provista de barracas donde reposa el vino». Este lugar, con importantes actividades desde 1777, ha preservado su arquitectura antigua, manteniendo el ambiente que los antiguos viticultores vivieron.
El recorrido por las barracas permite observar cómo se han utilizado a lo largo de los años. En algunas áreas se pueden ver letreros de hojalata que indican nombres como «la Sala Saltillo», testimonios de un pasado lleno de historia. El viajero también destaca que «el tour de Casa Madero incluye visitar los salones donde se encuentran los cientos de barracas de madera que se emplearon para la confección del vino». Estos espacios, que albergan las primeras prensas de madera, invitan a los visitantes a sumergirse en el arte de la viticultura mexicana , haciendo de Casa Madero un lugar imperdible en Parras de la Fuente.
Museos curiosos y sitios con encanto cultural Museo de los Monos, por Pita Hernandez El Museo de los Monos es una de las sorpresas más singulares que Parras de la Fuente tiene para ofrecer. Este peculiar espacio cuenta con una colección de 72 figuras elaboradas a mano por Don José Cruz Hernández Reyes, quien utiliza material reciclado como madera, plástico y cajas de refresco. Los visitantes quedan fascinados al descubrir «personajes de películas de terror, políticos mexicanos y extranjeros, luchadores», entre otros, todos representados con un estilo original y creativo.
Los viajeros han elogiado la pasión y dedicación de Don José, quien ha sido descrito como un artista visionario . Aunque algunos lo consideran un poco excéntrico, en una entrevista expresó: «Yo quisiera de veras estar loco, para hacer otras cosas, inventar otras cosas para ayudar a Parras, porque tiene mucho turismo, tiene cosas que ver como esto que está fuera de lo común para que la gente se lleve un bonito recuerdo de este municipio». Esta afirmación resuena con quienes han tenido el placer de visitar su museo, destacando la importancia de su trabajo en la cultura local y el turismo. Sin duda, el Museo de los Monos es un lugar que vale la pena explorar para vivir una experiencia única en Parras de la Fuente.
Casa de la Cultura, por Diana Patricia Montemayor Flores La Casa de la Cultura de Parras de la Fuente se erige como un magnífico centro cultural en el casco antiguo del pueblo, a pocas cuadras de la Plaza del Reloj y de la Alameda. Este lugar es destacado por su Sala Madero , donde «exhibe fotografías y pertenencias de Francisco I Madero, figura política singular tal vez poco reconocida por los mexicanos», según menciona Diana Patricia Montemayor Flores . Además, el recinto rinde homenaje a otros personajes destacados de la Revolución, como Venustiano Carranza, lo que lo convierte en un espacio significativo para la comprensión del contexto histórico de la región.
El edificio en el que se ubica la Casa de la Cultura fue la residencia de una de las artistas más reconocidas del estado, quien generosamente cedió su hogar para que se convirtiera en este espacio cultural. Aquí, jóvenes y adultos pueden disfrutar de una variedad de cursos de arte y desarrollo humano . La viajera asegura que es un «atractivo más de Parras», lo que subraya su importancia en la vida cultural del pueblo. Visitar este lugar no solo enriquece el conocimiento sobre la historia de México, sino que también ofrece la oportunidad de participar en diversas actividades artísticas, haciendo de la Casa de la Cultura una parada imperdible en Parras de la Fuente.
Rincones para descubrir la historia y arquitectura local Hacienda del Rosario, por Diana Patricia Montemayor Flores La Hacienda del Rosario , un conjunto arquitectónico de gran relevancia histórica, se erige como un símbolo de la venerable familia Madero en Parras de la Fuente. Esta antigua mansión, de color coral, ha sido conservada cuidadosamente y se rodea de hermosos jardines donde crecen nogales, higueras, aguacates y rosas. La viajera Diana Patricia Montemayor Flores comenta que la hacienda, antiguamente un epicentro de la vida social y económica, fue la casa familiar de Don Evaristo Madero, quien estuvo vinculado con importantes actividades como las minas y la industria textil.
Aunque no es posible acceder al interior de la hacienda, los visitantes pueden disfrutar de su imponente arquitectura desde los jardines. Juan Martinez Flores destaca la «hermosa arquitectura antigua » que una vez albergó a figuras prominentes de la época. Sin duda, la Hacienda del Rosario es un lugar que merece ser admirado, representando la riqueza cultural y el legado histórico de Parras de la Fuente, aunque el viajero Mapimi y Parras Manufacturing Co enfatiza la importancia de revisar la historia detrás de esta emblemática edificación.
Corredor Turístico de Parras, por Diana Patricia Montemayor Flores El Corredor Turístico de Parras de la Fuente se presenta como un destino imperdible que refleja la esencia de este encantador pueblo, también conocido como «El Oasis de Coahuila «. Su fama proviene de la fertilidad de sus suelos, que son alimentados por mantos acuíferos subterráneos. Diana Patricia Montemayor Flores destaca la belleza de estas acequias que «surgen en forma de acequias» y se convierten en el escenario perfecto para que los niños se diviertan y se refresquen durante los cálidos días de verano.
A la entrada del pueblo, el parador turístico se constituye en un punto de encuentro para las familias que buscan un espacio de esparcimiento. Esta área está equipada con asadores, mesas y juegos infantiles, lo que la convierte en un lugar ideal para disfrutar de una tarde en compañía de seres queridos. La viajera menciona que es «frecuente ver a un grupo de familias» disfrutando de un día al aire libre, riendo y compartiendo momentos inolvidables . Sin lugar a dudas, el Corredor Turístico es el lugar perfecto para disfrutar de la naturaleza y la convivialidad que caracteriza a Parras de la Fuente.
Tienda de Vinos de Casa Madero, por Diana Patricia Montemayor Flores La Tienda de Vinos de Casa Madero es un rincón encantador ubicado en Parras de la Fuente, que atrae tanto a amantes del vino como a curiosos que desean explorar la historia de esta renombrada bodega. La viajera Diana Patricia Montemayor Flores describe la tienda como «una pintoresca tienda que da la bienvenida al fondo de los jardines de Casa Madero», siendo un punto de partida perfecto para quienes inician el tour por las bodegas. Aquí, los visitantes pueden adquirir una variedad de vinos de mesa de calidad premiada, además de aguardiente y brandy.
Este lugar no solo ofrece productos excepcionales, sino que también alberga piezas históricas que relatan la rica herencia de la empresa, como barriles y alambiques. «La tienda es en realidad un imán», menciona Diana, porque a pesar de no realizar una compra, es difícil resistirse a visitar este sitio lleno de encanto. También se pueden adquirir boletos para acceder a los viñedos, ya sea en calandria o a caballo, lo que convierte la experiencia en algo aún más memorable. Sin duda, la Tienda de Vinos de Casa Madero es un lugar que no debe perderse al visitar Parras de la Fuente.
Tienda de Bodega el Vesubio, por Diana Patricia Montemayor Flores La Tienda de Bodega el Vesubio es un lugar emblemático en Parras de la Fuente, donde la historia y la tradición vinícola se combinan en un entorno cautivador. Establecida en 1891 por Nicolás Nicolielli, esta casa vinícola ofrece una selección exclusiva de vinos generosos y de mesa, destacándose en la producción de vinos para oficios religiosos. Como menciona Diana Patricia Montemayor Flores , «tiene la característica de que solo se venden en ese sitio, a diferencia de otras casas comerciales que ofertan sus productos en tiendas y supermercados del país».
Ubicada en una antigua casona en el centro del pueblo, la tienda se convierte en un punto de encuentro para los amantes del vino. El actual propietario recibe a los visitantes personalmente, compartiendo historias y fotografías históricas de la empresa, lo que permite a los viajeros conocer más sobre sus orígenes y su trayectoria. El viajero se siente atraído no solo por la calidad del producto, sino también por la atención y el ambiente familiar que se respira en este lugar.
Aunque la bodega se encuentra justo frente a la tienda, las visitas están restringidas a quien las solicite con antelación. Esto añade un toque de exclusividad a la experiencia. La Tienda de Bodega el Vesubio es un destino imperdible para quienes desean disfrutar de un vino excepcional y sumergirse en la rica cultura vinícola de Parras de la Fuente .
Casas de Parras, por Diana Patricia Montemayor Flores Casas de Parras es uno de los tesoros que esconde el pueblo de Parras de la Fuente , un lugar que rebosa historia y encanto. Este pueblo, fundado en 1598 por el padre jesuita Juan Agustín de Espinoza, se destaca por sus antiguas edificaciones, que cuentan la historia de un tiempo donde el cultivo de la vid y el olivo floreció. Como menciona una viajera, «casas antiguas salpican el pueblo, todavía con sus rejas, sus marcos, sus puertas», lo que invita a los visitantes a sumergirse en la vida cotidiana de sus antiguos habitantes.
Desde el siglo XVI, Parras también era conocida como el Valle de los Pirineos, gracias a su similitud con las tierras europeas. Una de las joyas de este lugar es la herencia de la producción vinícola , con bodegas icónicas que aún perduran, como las Antiguas Bodegas de Perote y la Casa Madero en la Hacienda San Lorenzo . La viajera Diana Patricia destaca que «resulta interesante observarlas e imaginarte la vida que llevarían sus habitantes», ofreciendo una experiencia que conecta el presente con el pasado.
Explorar Casas de Parras es vivir la historia en cada rincón, disfrutar de sus paisajes y dejarse llevar por la magia de su legado arquitectónico .
Monumentos y grandes figuras de la ciudad Monumento a Juan Antonio de la Fuente, por Rafael Blando El Monumento a Juan Antonio de la Fuente se erige en la Plaza del Beso de Parras de la Fuente, un homenaje a este gobernador que dejó una huella significativa en el desarrollo del pueblo. Los viajeros destacan que este espacio es ideal para disfrutar de una tarde tranquila. Rafael Blando menciona que «es un rincón curioso» donde la estatua de Juan Antonio se encuentra rodeada de jardines, haciendo del lugar un ambiente pintoresco y acogedor, perfecto para relajarse. Muchos visitantes sugieren sentarse en las bancas de la plaza, degustando una nieve del pueblo o algún dulce típico, lo que añade un toque especial a la experiencia.
Además, Juan Martinez Flores resalta que las plazas y monumentos históricos de esta localidad son verdaderamente hermosos, convirtiendo cada visita en una oportunidad para explorar la cultura local. La Plaza del Beso no solo es un espacio para rendir homenaje a la historia de Parras de la Fuente, sino también un punto de encuentro para los que desean disfrutar de la esencia de este pueblo mágico.
Monumento a los Fundadores, por Diana Patricia Montemayor Flores En la entrada del Pueblo Mágico de Parras de la Fuente se erige con orgullo el Monumento a los Fundadores , un emblema que honra la rica historia de este lugar. La viajera Diana Patricia Montemayor Flores destaca que esta escultura, que presenta a un indio, un sacerdote y un español, simboliza los orígenes de la comunidad, creada en 1598 por el padre jesuita Juan Agustín de Espinoza con el nombre de Misión de Santa María de las Parras. La importancia histórica de este sitio es evidente, ya que se encuentra cerca de la vinícola más antigua del continente americano, Casa Madero, la cual fue establecida en 1597 por don Lorenzo García.
Los viajeros que visitan el monumento no solo aprecian su valor simbólico, sino también su bella localización en un entorno natural impresionante . Como resalta una experiencia compartida, Parras de la Fuente es un «valle rodeado de montañas y colinas» que no solo ofrece atractivo visual, sino también un fértil suelo propicio para el cultivo de diversas frutas y vides. Al visitar este monumento, los turistas pueden sumergirse en la historia y belleza de un destino que continúa fascinando a quienes lo descubren.
Experiencias originales y paseos insólitos Viñedos de Casa Madero, por Diana Patricia Montemayor Flores En Parras de la Fuente, los viñedos de Casa Madero son un destino imperdible que combina historia y tradición en la producción vinícola . Fundados en 1597, se consideran los viñedos más antiguos de México . La historia de este lugar se remonta a la autorización del rey Felipe II para establecer la Hacienda de San Lorenzo, donde se cultivaron cepas de gran calidad. Según el viajero Miguel de la Mota y Escobar, «El frío del invierno no es penoso, ni el calor del verano congojoso. Es este el Valle muy acomodado para viñas…». Esta rica herencia ha dado lugar a un entorno donde el vino se elabora con pasión y dedicación.
La familia Madero ha mantenido el legado de estos viñedos, que no solo son un símbolo cultural, sino que también ofrecen empleo a cientos de trabajadores que se encargan de la producción y elaboración de vino, aguardiente y brandy. Como menciona la viajera Diana Patricia Montemayor Flores , «Estos viñedos proporcionan trabajo y por consecuencia, bienestar para los cientos de viñadores». Visitar Casa Madero es sumergirse en una experiencia única que permite disfrutar de la historia, la cultura y, por supuesto, de un excelente vino en un entorno que resalta la belleza de Parras de la Fuente.
Paseo en calandria por viñedos, por Diana Patricia Montemayor Flores El paseo en calandria por los viñedos de Casa Madero es una experiencia que los visitantes de Parras de la Fuente no deben perderse. Este recorrido, que dura aproximadamente una hora, permite admirar los hermosos paisajes que rodean la histórica bodega. Diana Patricia Montemayor Flores describe el paseo como una oportunidad irresistible para «dejarte llevar por el ranchero por los viñedos», comentando que «los jóvenes que te llevan son amables y se detienen las veces que desees, ya sea para acercarte a las parras o para tomar fotografías».
Con un costo de 400 pesos, se puede adquirir el boleto en la tienda de vinos, y la calandria te espera al lado de la Iglesia de la Hacienda. Este paseo no solo es una forma maravillosa de conocer la belleza de los campos, sino que se transforma en un momento memorable que permite disfrutar de la tranquilidad del entorno. La combinación de hospitalidad y el encanto de los viñedos hacen de esta experiencia un imperdible en Parras de la Fuente.
El puesto de Polita, por Diana Patricia Montemayor Flores El Puesto de Polita es un ícono en la entrada de Parras de la Fuente, donde la calidez y hospitalidad de los locales se reflejan en cada rincón. Polita, una mujer oriunda de la región, es el alma de este puesto, que se ha convertido en un punto de referencia para los visitantes. Durante todo el año, ofrece una variedad de productos frescos que resaltan la riqueza agrícola de la zona.
Diana Patricia Montemayor Flores describe a Polita como “una mujer que todo el año trabaja en su puesto vendiendo productos de la región”, destacando especialmente la época de la vendimia cuando ofrece uvas, granadas, manzanas, ciruelos y mangos. En septiembre, la nuez es la estrella de su venta, y como menciona otra visitante, “en noviembre y diciembre, tamales y el resto del año galletas, empanadas y pan”.
El puesto, siempre animado y lleno de color, refleja el buen humor y la alegría de Polita, una campesina con la piel morena que comparte con cariño su cultura y su gastronomía. Visitar su puesto no solo es una oportunidad para deleitarse con sabores auténticos , sino también para disfrutar de un momento cálido y auténtico que captura la esencia de Parras de la Fuente.
Acueducto de Parras, por Diana Patricia Montemayor Flores El Acueducto de Parras , construido en 1917, es una de las joyas arquitectónicas que añaden un encanto particular a este pintoresco valle conocido como el «Valle de los Pirineos «. Su estructura elevada, formada por arcos de piedra, fue inicialmente diseñada para mover turbinas y generar electricidad. Diana Patricia Montemayor Flores destaca que este acueducto «deja pasar libremente un caudal de agua clara y fresca», lo que lo convierte en un lugar atractivo especialmente durante los calurosos días de verano.
Los alrededores del acueducto están adornados por altos nogales y encinos, creando un ambiente ideal para familias y grupos de amigos que buscan un espacio de esparcimiento. Es común ver a niños jugando y refrescándose en sus aguas, mientras que los domingos se puede observar a muchas familias disfrutando de días de campo bajo la sombra de estos árboles. Esta conexión con la naturaleza y la vida comunitaria resalta la importancia del Acueducto de Parras en la cultura local , convirtiéndolo en un sitio imperdible para quienes visitan la región.
Pista de Aterrizaje de Casa Madero, por Diana Patricia Montemayor Flores La pista de aterrizaje de Casa Madero se convierte en un atractivo imperdible en Parras de la Fuente. Con una extensión de aproximadamente cinco kilómetros, este lugar es ideal para disfrutar de paseos a caballo , en calecita o en bicicleta. Diana Patricia Montemayor Flores comenta sobre la belleza del entorno, describiendo un recorrido que «se realiza en el marco de parras cargadas de fruta, hojas verdes en diferentes tonalidades y un cielo más que azul cargado de nubes blancas». La pista, que originalmente servía a la empresa, es ahora accesible para todos quienes desean vivir esta experiencia.
El ingreso a la pista tiene un costo que se abona en la tienda de Casa Madero. La viajera menciona el costo de 400 pesos por la experiencia en calecita , destacando que «recorrer la pista constituye una experiencia muy agradable». Sin duda, es un lugar donde se aprecian la naturaleza y la tranquilidad, en un ambiente donde parece que la contaminación queda lejos. Ideal para quienes buscan conectarse con la belleza del campo y disfrutar de una actividad recreativa en un entorno único .
Parras de la Fuente se revela como un destino inigualable que combina historia, cultura y naturaleza en cada rincón. Desde sus emblemáticas iglesias y museos hasta la vibrante celebración de la Vendimia , cada experiencia deja una huella. A través de sus paisajes y tradiciones , este pueblo invita a los visitantes a crear recuerdos inolvidables en un entorno cautivador. Ven y descubre todo lo que este encantador lugar tiene para ofrecer.