Logo minube
Perfil

Las mejores playas para perderte por Galicia

Autor
Luis Francisco Oliver

«Si buscas la calma, la naturaleza y enclaves mágicos, en los embravecidos mares de Galicia encontrarás arenales infinitos, playas salvajes esculpidas marea tras marea e impresionantes acantilados coronados por faros. Galicia y sus playas son un plan perfecto para cualquier época del año pero gana enteros con el buen tiempo y se convierte en un plan único si además te alojas en alguno de sus hoteles rurales con encanto

 

 

Playa de Rodas 

Una playa imprescindible en tu ruta gallega. Cuando en 2007 The Guardian la coronó como la mejor del mundo, lo hizo con mucho criterio. Sus aguas cristalinas, las dunas, su amplia playa de arena blanca y fina, hacen de ella un auténtico paraíso.

Para llegar a ella debes coger el ferry que te lleva a las islas Cies. Hazlo con previsión porque al ser una reserva natural, las entradas son limitadas, eso si, tranquilo que tiene más de 1km de largo. No dejes de hacer el paseo que te sube hasta el faro y de visitar otras playas como la de Nossa Señora para completar un día de 10.

Playa de las Furnas 

En el municipio de Porto do Son se alza majestuosa una playa labrada por las olas. Más de dos kilómetros y medio de playa virgen y unas maravillosas piscinas naturales con aguas de color azul verdoso hacen de este rincón un imprescindible para los amantes de la naturaleza en estado puro.

No te pierdas su impresionante puesta de sol y abre bien los ojos pues durante todo el año pasan delfines por estas aguas.

Playa de Xilloi 

En Lugo encontramos esta playa semiurbana enclavada entre dunas, juncos y acantilados. Un kilómetro de arenal blanco y fino con vistas al puerto de Bares y a la desembocadura de la ría.

Tiene forma de concha y al estar resguardada hay muy poco oleaje de modo que es perfecta para toda la familia. Tienes además todos los servicios (baños, restaurante, aparcamiento). Llegas a la playa por pasarelas de madera para no dañar el ecosistema de las dunas.

Playa de Carnota 

La playa más larga de Galicia está, además, en un enclave único. Casi siete kilómetros de costa y medio kilómetro de anchura cuando la marea está baja, hacen de ella un lugar apacible en el que rara vez encontrarás muchos visitantes.

Rodeada de montañas presididas por el magestuoso monte Pindo, tiene también marismas en las que avistar multitud de aves. Completa tu día con una visita al hórreo de Carnota, el pueblo de Caldebarcos y la cascada del río Xallas.

Playa Mar de Fóra 

Junto al cabo de Finisterre encontramos esta maravillosa playa poco concurrida en la que darte un agradable paseo y disfrutar de su magnífica puesta de sol.

La ruta que va desde el faro hasta la playa es digna de mención. Las aguas son bravas así que el baño no es su principal reclamo, pero la magnificencia del entorno, hace de este lugar un enclave mágico.

Playa de Arealonga

Más conocida como «Playa de Castro», esta playa suma el atractivo arqueológico con el de la calma y la belleza natural. Es una playa semi-nudista ubicada junto al Castro de Baroña, un asentamiento celta que data del siglo I d.C, el único ubicado frente al mar.

Su hermosa puesta de sol, los restos del castro y el entorno salvaje, hacen de ella una de las playas más especiales que encontrarás en Galicia. Desde la carretera son unos 10 minutos de paseo.

A Lanzada

Entre O Grove y Sanxenxo encontramos esta infinita playa de gran belleza natural. Es pintoresca, con formaciones rocosas, de arena fina y aguas cristalinas. Una de las favoritas de los amantes de los deportes de agua como el surf o el windsurf. Su accesibilidad y la facilidad de aparcamiento hace que sea una playa perfecta para ir con la familia.