El pulso vibrante de Múnich: plazas y puntos de encuentro icónicos Marienplatz, por Ignacio Izquierdo Marienplatz es el corazón de Múnich y uno de los espacios más emblemáticos de la ciudad. Esta impresionante plaza, que en la Edad Media albergaba un mercado de sal y cereales, hoy está rodeada de magníficos edificios, siendo el Neues Rathaus la joya de la corona. Francisco Javier Escobar Tejada destaca que se puede pasar horas «observando todos y cada uno de los detalles» de su fachada, que está adornada con gárgolas, estatuas y una ornamentación exquisita.
El carillón, el quinto más grande de Europa, es una atracción imprescindible . Laritza Fernández señala que «todos los días a las 11:00, 12:00 y 17:00 horas» los autómatas de este mecanismo realizan una danza que conmemora un evento histórico, atrayendo a multitudes. No es solo la belleza arquitectónica lo que fascina, sino también el ambiente vibrante que emana de la plaza. Ignacio Izquierdo comparte que Marienplatz es «el corazón de la ciudad», desde donde se irradian las principales calles comerciales.
Por último, la experiencia se completa con la posibilidad de disfrutar una cerveza típica en una de las cervecerías locales después de explorar la plaza. Marienplatz es una visita obligada para cualquier viajero que desee adentrarse en la esencia cultural y social de Múnich.
Odeonsplatz, por Lugares inesquecíveis Odeonsplatz es una plaza emblemática en el corazón de Múnich, cargada de historia y rodeada de una arquitectura inspiradora . Este espacio fue encargado por el rey Luis I de Baviera en el siglo XVIII tras la demolición de las fortificaciones de la ciudad y presenta un estilo italiano, destacando la imponente Feldherrnhalle. Los viajeros destacan su relevancia histórica, mencionando cómo «Odeonsplatz fue uno de los lugares favoritos de Hitler para sus discursos», lo que añade una profundidad a su belleza.
El ambiente en la plaza es vibrante, con una gran cantidad de bares, cafeterías y tiendas que invitan a disfrutar del entorno. «Para disfrutar del entorno con serenidad», resalta un viajero, sugiriendo que es un lugar ideal para relajarse mientras se observa la arquitectura circundante. Aunque algunas opiniones indican que es «interesante pero poco espectacular», la mayoría coincide en que vale la pena visitarla por su importancia en la historia reciente de Múnich. Visitar Odeonsplatz es, sin duda, sumergirse en un capítulo significativo de la historia bávara.
Plaza de Max Joseph, por Ciro La Plaza de Max Joseph es un impresionante espacio que constituye un punto de encuentro entre la cultura y la historia de Múnich. Este amplio boulevard desemboca en una de las áreas más emblemáticas de la ciudad, donde se erige con orgullo una majestuosa estatua de Maximiliano José I , el rey que promulgó la primera constitución alemana en 1818. Según una viajera, es «el boulevard más bonito de la capital bávara «. A su alrededor, la plaza está flanqueada por edificios notables, como el monumental National Theater, famoso por ser escenario de numerosas óperas de Wagner.
Un viajero destaca que «la plaza está situada entre la Ópera y el Palacio Imperial de Múnich», lo que la convierte en un punto neurálgico de la vida cultural. En su arquitectura resuena un estilo italiano neoclásico, con el Palacio Törring-Jettenbach a un lado y el Residenz, un antiguo palacio de la familia Wittelsbach, al otro. La elegancia y el clasicismo que emana la plaza son reflejo de la propia esencia de Múnich, un lugar que invita tanto a pasear como a disfrutar de su rica herencia cultural.
Bordeaux platz, por Antoine D'Audigier Bordeaux Platz es un rincón encantador en Múnich que invita a los viajeros a disfrutar de un respiro en medio de la ciudad. Según el viajero Antoine D’Audigier , esta plaza es el resultado de las influencias francesas en la ciudad, evidentes en las calles que llevan nombres de ciudades de Francia. En Bordeaux Platz, se extiende un amplio espacio que se convierte en un lugar ideal para relajarse, especialmente a lo largo de la línea del tranvía.
La plaza cuenta con áreas verdes donde sorprenden curiosas formaciones en el césped, descritas por Antoine como «una especie de círculos en los cultivos urbanos que da la apariencia de una cara sonriente». Este atractivo visual no solo embellece el lugar, sino que también lo convierte en un sitio perfecto para un picnic o una pausa durante un día ajetreado de exploración. Muchos visitantes coinciden en que Bordeaux Platz representa una fusión única de historia y naturaleza, ofreciendo un remanso de paz donde se puede apreciar el estilo de vida bávaro.
Petersplatz, por Cristina E Lozano Petersplatz, o Plaza de Pedro, es un encantador rincón situado muy cerca de la famosa Marienplatz. La viajera Cristina E Lozano describe esta pequeña plaza adoquinada como un «ágora comercial ideal para relajarse y ver la vida pasar». Aquí, los visitantes pueden disfrutar de un café en alguna de las terrazas que la rodean, todo ello bajo la sombra de la impresionante Iglesia de San Pedro, cuyas paredes abarcan parte del espacio.
Este lugar es un punto de encuentro tanto para turistas como para locales. Cristina destaca la dualidad de sus visitantes, señalando que “los primeros los reconocerás por la cámara, a los segundos por las bolsas de la compra”. Las bicicletas son bienvenidas, lo que la convierte en un sitio accesible para todos. Petersplatz ofrece una experiencia auténtica, rebosante de vida y actividad, perfecta para aquellos que buscan sumergirse en el vibrante ambiente de Múnich lejos de los lugares más concurridos.
Entre jarras y tradición: el alma festiva de Múnich Hofbräuhaus München, por Ignacio Izquierdo Hofbräuhaus München es sin duda una de las atracciones turísticas más emblemáticas de la ciudad. Esta cervecería, situada a escasos metros de Marienplatz, ha sido un punto de encuentro esencial desde su inauguración en 1589. Aquí, el viajero José Luis Sarralde destaca la experiencia de compartir largas mesas de madera con personas de todo el mundo, mientras una orquesta llena el ambiente con música bávara. “No puedes irte sin visitarla”, señala Carolina Londoño Molina , quien también resalta la excepcional calidad de la comida , sugiriendo el codillo y las salchichas como platos imprescindibles.
La magnitud del lugar, que puede albergar hasta 2500 personas, lo convierte en un espacio vibrante y animado . A menudo, la viajera María Carmen García Moraleda menciona que encontrar mesa puede ser un desafío, pero es parte del encanto del lugar. La habilidad de las camareras, que llevan hasta doce jarras a la vez, deja a muchos impresionados.
Aunque algunos consideran que Hofbräuhaus es más una atracción turística que un auténtico bar local, como menciona Ignacio Izquierdo , la combinación de buena comida, música y ambiente festivo hacen que cada visita sea memorable. Como apunta el viajero jessiedani , este lugar te hará sentir como si estuvieras en una constante Oktoberfest, convirtiendo tu experiencia en un recuerdo inolvidable de Múnich .
Oktoberfest, por CAPELLOISE El Oktoberfest es sin duda uno de los eventos más emblemáticos de Múnich, una celebración que va más allá de la simple fiesta. Antonio Miguel destaca que es «uno de los sitios mejores del mundo para conocer y disfrutar con amigos de la mezcla de culturas», donde la alegría se siente en cada rincón. Esta gran fiesta se celebra en la última semana de septiembre y atrae a millones de visitantes que se sumergen en un ambiente de camaradería , comiendo, bailando y brindando con jarras de un litro de cerveza.
Ana Gálvez aconseja a los visitantes no limitarse a la cervezada, sino explorar las diversas atracciones y la rica historia de la ciudad: «No os encerréis solo en la ‘birra’, que hay mucho que ver». Además, la experiencia de disfrutar de la música en vivo y la variedad de casetas climatizadas permite a los asistentes vivir un momento único.
Kelly Nuñez Tozzi lo resume perfectamente al afirmar que es una «experiencia que jamás olvidarás», donde puedes probar cervezas de diferentes cerveceras locales y conocer gente de todas partes. Aunque Noel Broda menciona que la experiencia puede variar y no siempre refleja la cultura alemana, la mayoría se siente atraída por la diversión y el ambiente acogedor, reafirmando que una visita a Múnich durante el Oktoberfest es un evento que se debe experimentar al menos una vez en la vida.
Cerveceria Augustiner Bräu, por Lucio Sassi En el corazón de Múnich, la cervecería Augustiner Bräu se erige como un verdadero símbolo de la tradición bávara . Con más de 600 años de historia, es la cervecería más antigua de la ciudad y ofrece a los visitantes una inmersión total en la cultura local. Alvaro Garrido Garcia destaca la importancia de “reservar mesa ”, especialmente si visitan este lugar por primera vez, ya que se convierte en un punto de encuentro para aquellos que desean disfrutar de una auténtica experiencia bávara .
La cervecería se extiende por tres amplias plantas, lo que garantiza un ambiente animado y vibrante , ideal para compartir unas cervezas con amigos. AnnaMeo menciona que “las mesas están todas unidas”, lo que fomenta la interacción entre los comensales y crea una atmósfera cálida y acogedora, sobre todo después de unas cervezas. El menú es extenso y ofrece platos típicos de Baviera , además de opciones vegetarianas, lo que lo convierte en un lugar perfecto para degustar las delicias locales .
Augustiner Bräu no es solo un lugar para beber cerveza, sino un rincón donde la tradición se vive y se celebra en cada bocado y sorbo.
Mercadillos navideños Múnich, por Lorena Garcia Los mercadillos navideños de Múnich son un auténtico viaje a la esencia de la Navidad europea. Atraen a miles de visitantes cada año gracias a su increíble diversidad y ambiente festivo. Como comenta la viajera Lorena Garcia , “el motivo de nuestro viaje a Múnich fue precisamente visitar sus mercados navideños…y sin duda merecen la fama mundial que tienen”. Callejear por la ciudad supone descubrir una variedad de mercadillos, desde los más grandes hasta los acogedores que se esconden en pequeñas plazas.
El viajero Alvaro Garrido Garcia describe la experiencia con nostalgia: “venir a Múnich en Navidad es vivir lo que pensabas que era la Navidad cuando eras niño”. Además de la magia del entorno, la gastronomía local juega un papel fundamental. Cada mercadillo exhibe cientos de casetas decoradas con esmero, donde puedes probar salchichas, dulces y el famoso Glühwein, un vino caliente que te reconfortará en las frías noches invernales. Es recomendable perderse en este ambiente alegre y festivo, asegurándote de no dejar de lado los adornos artesanales y el esplendor de cada esquina. Sin duda, una visita a Múnich en diciembre no estaría completa sin recorrer estos encantadores mercadillos.
Arbol de mayo, por Ciro En el vibrante Viktualienmarkt de Múnich se erige el árbol de mayo, conocido como Maibaum, un símbolo emblemático de la festividad bávara del 1 de mayo. Este majestuoso árbol puede alcanzar hasta 30 metros, decorado con los característicos colores de Baviera y representaciones de tradiciones locales. Ciro comenta que «la preparación del árbol requiere la ayuda de toda la comunidad, que trabaja con la única fuerza física», destacando la unión y el esfuerzo colectivo en esta tradición.
Marie y Matt añaden que el árbol es una de las tradiciones más antiguas de Baviera, asociada a la fertilidad, lo que crea un contraste fascinante en un Múnich que, a menudo, se percibe como muy cristiano. La presencia del Maibaum en medio del mercado de artesanía y productos gourmet le otorga un nuevo sentido, otorgando vida a una tradición que sigue viva a través de los años. Este elemento cultural no solo es visualmente impactante, sino que también simboliza la rica historia y el espíritu comunitario que caracteriza a esta región alemana.
Historia imperial y palaciega: testigos del esplendor bávaro Palacio de Nymphenburg, por Emilio Macias El Palacio de Nymphenburg , situado en Múnich, es un destino que evoca la majestuosidad y el romanticismo de épocas pasadas. Manuel describe este lugar como «uno de esos lugares tan mágicos y bonitos que, por mucho que te lo cuenten, no te lo acabas de creer». Su imponente fachada y amplios jardines se combinan para ofrecer una experiencia visual única , perfecta para un paseo romántico o reflexivo, especialmente junto a sus lagos.
La historia de Nymphenburg es igualmente cautivadora. Lorena84 destaca que su nombre proviene de la diosa Flora y que fue construido originalmente en el siglo XVII para la Electora Enriqueta Adelaida. La ampliación realizada por Joseph Effner desde 1715 dio lugar a espacios emblemáticos, como la Galería de Bellezas , donde se exhiben retratos de las mujeres más admiradas de la corte. Los jardines son considerados una «verdadera preciosidad», ideales para desconectar del bullicio de la ciudad.
En invierno, el lugar se transforma. Gianni Mafé menciona que el lago se congela, permitiendo patinar y disfrutar de deportes sobre hielo hasta horas nocturnas, mientras que Rachel White resalta el encanto tanto del palacio como de sus jardines. Para aquellos que buscan un momento de calma, un paseo por Nymphenburg es realmente recomendable, tal como enfatiza Alvaro Garrido Garcia al mencionar que «los jardines son enormes y preciosos». Con solo un boleto de entrada de seis euros, vale la pena explorar este refugio que captura la esencia del esplendor bávaro.
Palacio de justicia, por Marie & Matt El Palacio de Justicia de Múnich es una joya arquitectónica que destaca por su estilo típico alemán y su imponente diseño. Situado cerca del jardín botánico, este magnífico edificio no pasa desapercibido para los visitantes, como señala un viajero: «Impresionante edificio situado cerca del jardín botánico, el palacio de justicia está construido en estilo típico alemán con una arquitectura masiva». Su grandiosidad invita a los turistas a explorar su exterior y apreciar los detalles de su fachada.
Además, el palacio se ha convertido en un punto de referencia clave en la ciudad. Otro viajero lo menciona como «uno de los últimos monumentos que se pueden ver antes de regresar a la estación central» si se utiliza el autobús Grayline, destacando su importancia en el recorrido turístico de Múnich. La cercanía a otros atractivos lo convierte en una parada ideal para aquellos que desean disfrutar de la riqueza cultural de la ciudad. No olvides incluirlo en tu itinerario, ya que su presencia imponente es una experiencia que no se debe perder .
La Residencia de Múnich, por viagenscomguia La Residencia de Múnich , conocida como el Residenz, es un palacio impresionante situado en el corazón de la ciudad. Este majestuoso edificio fue la residencia oficial de los Reyes de Baviera, lo que le confiere un gran valor histórico. Un viajero comenta que «la gran parte de su patrimonio se compone de las Joyas de la Corona «, un legado que atrae a muchos curiosos. Aunque sufrió graves daños durante la Segunda Guerra Mundial, se ha llevado a cabo una restauración eficaz que permite apreciar su grandeza.
Dentro de sus salas, se pueden encontrar colecciones diversas que incluyen «adornos art nouveau, muebles antiguos intactos y una habitación que casi podría eclipsar el palacio de hielo». Esta variedad hace que el Residenz no solo sea un palacio, sino también un fascinante museo que narra la historia de Baviera. Según otra experiencia, «se debe dedicar al menos dos horas» para disfrutar plenamente de todo lo que ofrece, especialmente si eres un aficionado a la historia. Sin duda, la Residencia de Múnich es un tesoro que merece ser explorado.
Maximilianeum, por Marie & Matt Maximilianeum es un impresionante edificio que se encuentra al final de la famosa avenida de Múnich, ofreciendo vistas maravillosas del paisaje circundante. Los viajeros han destacado la singularidad de este lugar, mencionando que «al final de la avenida más rico de Múnich, no muy lejos de las playas de Lisar, se puede caer en el monumento». Esta construcción no solo es un símbolo arquitectónico , sino que también alberga una curiosa iniciativa. Según los visitantes, «algunos estudiantes más suerte que otros, si sus resultados son excelentes, se están pagando sus estudios por el gobierno». Esto añade un matiz fascinante al lugar, donde la educación y el apoyo académico se entrelazan con su esplendor arquitectónico. Con su rica historia y su entorno inspirador, Maximilianeum es un rincón de Múnich que vale la pena explorar, ofreciendo una experiencia que va más allá de lo icónico.
Paseos verdes y refugios naturales en la ciudad Jardín Inglés - Englischer Garten, por Antonio Díaz De Álvarez El Jardín Inglés, o Englischer Garten, es un vasto oasis de naturaleza y actividades en pleno corazón de Múnich. Su inmensidad sorprende a los visitantes, con senderos que invitan a ser recorridos a pie o en bicicleta, como menciona Francisco Javier Escobar Tejada , quien resalta que «este espacio cuenta con varios arroyos». En su zona central, se pueden encontrar restaurantes y terrazas donde disfrutar de una auténtica cerveza alemana , un detalle que no pasa desapercibido para quienes buscan un momento de relax al aire libre.
Uno de los atractivos más singulares es el famoso arroyo Eisbach, donde los surfistas aprovechan las olas artificiales. Janto Fernandez Gonzalez comparte su experiencia al decir que «a pesar de que esta ciudad alemana no tiene playa, si te gusta el surf puedes acudir a este lugar», brindando una perspectiva única sobre la actividad en el parque. En verano, el lugar se llena de vida, según María Victoria Rampa, quien menciona que «es increíble cómo puede usarse de atajo para llegar de Lehel a Odeonsplatz sin pasar por el U-bahn».
Además, el Jardín Inglés es perfecto para quienes buscan un respiro en la ciudad. Antonio Díaz De Álvarez lo describe como uno de los parques más bonitos de Europa , con «muy fácil acceso caminando como en metro». Un paseo por sus senderos también permite apreciar el magnífico río que lo bordea, ideal para descansar después de un día explorando. Con sus diversas actividades y belleza natural, el Jardín Inglés se convierte en una visita obligada para cualquier viajero en Múnich.
Hofgarten, por Marie & Matt Hofgarten es un rincón encantador en Múnich que invita a ser explorado, especialmente para quienes buscan momentos de tranquilidad y belleza natural . Este jardín, construido en el siglo XVII, se caracteriza por su diseño rectangular y caminos que conducen al pabellón central dedicado a la diosa Diana. Un viajero destaca que es «un lugar muy bonito por el cual pasear al atardecer «, lo que refleja la serenidad del entorno.
Los visitantes pueden disfrutar de un espacio bien cuidado lleno de césped y flores, que añaden color y vida al jardín. Marta, otra viajera, comparte que «fue un día fantástico cuando fuimos y vimos a muchas personas disfrutar del sol», algunos leyendo, otros conversando o disfrutando de una cerveza en la terraza. Además, el jardín es hogar de la Bavarian Staatskanzlei , un edificio gubernamental, y un monumento a la resistencia del grupo Rosa Blanca, lo que lo convierte en un lugar lleno de historia.
Aunque algunos lo comparan con el más grande Englischer Garten, Manuel señala que Hofgarten es «más bien agradable» y un «pequeño pulmón verde » que ofrece un espacio ideal para relajarse y disfrutar de la belleza clásica que lo rodea. Sin duda, Hofgarten es una parada obligatoria para quienes buscan escapar de la rutina y conectar con la esencia de Múnich.
Prinzengarten, por Marilo Marb El Prinzengarten, conocido también como los Jardines del Príncipe, es un espléndido espacio verde situado junto al majestuoso Palacio de Nymphenburgo. Con una extensión de 200 hectáreas, este jardín ofrece un entorno idóneo para disfrutar de un paseo relajante y contemplar la belleza natural. Un viajero destaca que este lugar «cuenta con esculturas, cascadas y riachuelos que le confieren un encanto especial.»
Dentro de sus límites, el Prinzengarten alberga numerosos pabellones de estilos diversos, entre los que se encuentran el Amalienburg, que fue antiguamente un pabellón de caza, y el Pagodenburg, que sirve como casa de té china. Otro viajero menciona «un magnífico lago donde podrás ver un gran número de cisnes y patos», lo que añade un toque pintoresco al paisaje. La tranquilidad de estos jardines, complementada por la rica historia que se respira en el aire, convierte a este atractivo en una visita obligada para quienes desean explorar más allá de los puntos turísticos más conocidos de Múnich.
Jardin del castillo Nymphenburg, por Marie & Matt El jardín del castillo de Nymphenburg es un rincón encantador en Múnich que permite a los visitantes disfrutar de su belleza natural. El parque que rodea el castillo es accesible de forma gratuita, lo que lo convierte en un lugar ideal para pasear sin preocupaciones. Según un viajero, «el parque del castillo de Nymphenburg a veces resulta francamente pequeño bosque, con grandes árboles de pino fragante que recubren el suelo de sus espinas». Este entorno natural crea una atmósfera serena, perfecta para desconectar del bullicio de la ciudad.
La transformación del paisaje estacional también resulta cautivadora, especialmente en otoño, cuando los robles despliegan su esplendor. Otro visitante menciona que «siempre debemos venir paseando en Múnich en otoño» para apreciar la magnificencia de los colores que adornan el parque. Con sus tranquilos senderos y exuberante vegetación, el jardín ofrece un refugio relajante y un espacio ideal para disfrutar de un picnic o simplemente contemplar la belleza que rodea el majestuoso castillo. Sin duda, es un lugar que merece ser explorado más allá de los puntos turísticos más conocidos.
BordeauxPark, por Marie & Matt BordeauxPark es un pequeño oasis poco conocido en Múnich, que destaca por su encantadora ambientación y la humedad refrescante de sus fuentes. Este lugar ha dejado una impresión duradera en quienes lo han visitado. Marie & Matt comentan que “nos ha saltado a los ojos cuando pasamos por el tranvía, por su nombre en francés”, lo cual añade un toque especial a la experiencia, ya que el nombre refleja una conexión inesperada con la ciudad de Burdeos en Francia.
Los visitantes aprecian la decoración cuidada del parque , que incluye una variedad de plantas y espacios bien diseñados que invitan a relajarse. La atmósfera de BordeauxPark es ideal para escapar del bullicio de la ciudad. Aquellos que han tenido la oportunidad de pasear por sus senderos disfrutan de un ambiente tranquilo y acogedor. Este rincón de Múnich es perfecto para una pausa durante un día de exploración, donde se puede observar la vida local mientras se aprecia la belleza del entorno natural. Sin duda, BordeauxPark merece una visita para quienes buscan una experiencia auténtica en la ciudad .
Fe y arquitectura sagrada: iglesias y símbolos de espiritualidad Frauenkirche - Catedral de Múnich, por Iván Marcos La Frauenkirche, o Catedral de Múnich, es un monumento emblemático que captura la esencia de la ciudad con su impresionante arquitectura. Con sus dos majestuosas torres, cada una coronada por cúpulas doradas, destaca en el horizonte de Múnich, siendo «la iglesia más grande de Múnich», como lo menciona un viajero. Su construcción, que se inició en el siglo XV, sufrió devastadores daños durante la Segunda Guerra Mundial, pero fue restaurada en 2005, recuperando su esplendor original.
El interior de la catedral es un viaje a la sutileza y la calma. «Grandes vanos, sustentados por columnas de un blanco inmaculado» dan una sensación de ligereza, mientras que las atrevidas vidrieras inundan el espacio de colores vibrantes. Un viajero comenta sobre el «halo místico» que emana de la sencillez y la linealidad de sus columnas, destacando la belleza de su arquitectura en comparación con otros templos europeos.
Afuera, la plaza adyacente, rodeada de restaurantes, invita a los visitantes a disfrutar de un momento de relajación. La leyenda de la huella del diablo , presente en el suelo de la catedral, añade un toque de misticismo, convirtiendo la visita en una experiencia memorable . Como menciona un viajero, «si quieres saber la leyenda, ¡visítala!» Sin duda, la Frauenkirche es un lugar que fascina y sorprende a cada paso.
Michaelskirche - Iglesia de San Miguel, por Diana Patricia Montemayor Flores La Iglesia de San Miguel , o Michaelskirche, es una joya del renacimiento que destaca en el corazón de Múnich. Construida entre 1583 y 1597 bajo el mandato del duque Guillermo V de Baviera, esta iglesia jesuita fue erigida como un centro espiritual durante la Contrarreforma . Su impresionante fachada muestra al Arcángel Miguel luchando contra el dragón, un símbolo de la fe triunfante. Diana Patricia Montemayor Flores resalta su grandeza al describirla como «la iglesia renacentista más grande de los Alpes», mientras que Virtu agrega que «en el sótano de la Iglesia se encuentran algunas tumbas reales», destacando la historia que alberga, incluyendo la de Luis II de Baviera.
A pesar de haber sido dañada durante la Segunda Guerra Mundial, su restauración ha devuelto a la iglesia su esplendor original. Como señala Pablo Estévez, el interior sorprende a los visitantes, y aunque la decoración es más sobria, las características barrocas, como la hermosa nave dorada, hacen que merezca la pena una visita. Este lugar no solo es un refugio espiritual, sino también un punto importante en la historia de la ciudad. Su belleza es reconocida, como indica Ciro , quien la considera «entre las más bellas de Mónaco». Sin duda, Michaelskirche es una parada imperdible en la exploración de Múnich.
Theatinerkirche, por Ángel Almansa Lujan Theatinerkirche es una de las gemas arquitectónicas de Múnich, construida en el siglo XVII por el arquitecto italiano Agostino Barelli. Este impresionante edificio fue erigido como agradecimiento por el nacimiento del hijo del elector Fernando María. Marta HojeConhecem destaca que su «fachada de estilo rococó pintada de amarillo contrasta con los edificios a su alrededor en la zona de Odeonplatz». Al ingresar, los visitantes quedan asombrados por «el interior completamente blanco » y la luz que inunda la nave central.
Chaimae menciona que su «cúpula central verdosa y sus campanarios de color dorado» cautivan desde el exterior, pero es el esplendor del interior lo que realmente sorprende. La iglesia es un homenaje a la fertilidad, con historias sobre la esposa del elector que pidió ayuda a San Gaetano como señala Ciro . Esta historia se manifiesta en los numerosos querubines y frescos. La cripta alberga las tumbas de algunos miembros de la Casa Wittelsbach, incluyendo al famoso Rey Maximilian II.
Los visitantes pueden disfrutar de conciertos de órgano y misas, como mencionan Marie y Matt, quienes consideran que es un lugar imperdible en la ciudad. Al ser de entrada gratuita, Theatinerkirche se convierte en una experiencia accesible y enriquecedora para todos aquellos que visitan Múnich.
Iglesia de San Pedro, por Simone Osias La Iglesia de San Pedro , conocida también como «Peterskirche», se erige como uno de los tesoros escondidos de Múnich . Este impresionante templo es un magnífico ejemplo de la arquitectura religiosa , y su interior cautiva a los visitantes por su luminosidad y elegancia. La viajera Simone Osias describe la experiencia al decir que «las hermosas decoraciones (pinturas) en las paredes de sus diversas bóvedas» ofrecen un espectáculo visual que resulta imperdible. El predominio del color blanco y el oro en su diseño contribuye a crear una atmósfera de paz y asombro.
La atención al detalle en los adornos es un aspecto que resalta la viajera Linda, quien anima a descubrir «todos los detalles de los diferentes adornos». Cada rincón de la iglesia invita a detenerse y apreciar el arte que la adorna. Además, la iglesia cuenta con un mirador que permite disfrutar de vistas panorámicas del centro de Múnich, convirtiendo la visita en una experiencia completa.
La Iglesia de San Pedro no solo es un lugar de culto, sino un espacio donde el arte y la historia se entrelazan . Su belleza y singularidad la convierten en una parada esencial para quienes deseen explorar Múnich más allá de sus atracciones más conocidas.
Iglesia de San Juan Nepomuceno - Asamkirche, por Lugares inesquecíveis Situada en Sedlinger Strasse, la Iglesia de San Juan Nepomuceno o Asamkirche es una joya del rococó que destaca por su impresionante y excesiva decoración. Construida entre 1733 y 1746 por la familia Asam, esta iglesia es un verdadero espectáculo visual que invita a los viajeros a maravillarse con su esplendor arquitectónico. Según un viajero, es «impresionante y excesiva» en su decoración, con cada rincón adornado de oro, lo que provoca que «no haya una esquina que no se llene con los adornos». La fachada es igualmente cautivadora, destacando la estatua de Juan de Nepomuk, que remata su hermosa estructura.
Al ingresar al recinto, los visitantes son recibidos por confesionarios decorados de forma notable, con elementos que incluyen esqueletos, lo que añade un aire extraordinario al lugar. La entrada es gratuita, lo que convierte a Asamkirche en una visita obligatoria en Múnich. Tal como menciona otro viajero, la iglesia es un «espectáculo para la vista «, un rincón que, aunque escondido entre otros edificios, garantiza una experiencia inolvidable para quienes se aventuran a descubrirlo.
Rincones curiosos y leyendas urbanas por descubrir La huella del Diablo, por Virtu La huella del Diablo es un fascinante misterio que se encuentra en la Catedral Frauenkirche , en el corazón de Múnich. Esta emblemática iglesia guarda una leyenda intrigante basada en un pacto con el diablo . Según los relatos, un arquitecto accedió a la ayuda del diablo para concluir la construcción de la catedral, a cambio de garantizar que no habría ventanas. Sin embargo, en un giro inesperado, al aparecer el diablo y descubrir las ventanas ocultas , ardió de rabia, dejando su huella grabada para la eternidad en el suelo. Como menciona un viajero, «en esta huella se puede apreciar una especie de espolón».
Al entrar en la catedral, la primera impresión es que solo hay un ventanal al fondo, pero la realidad es que las ventanas son más numerosas de lo que parecen. Virtu , quien comparó su pie con la huella, destaca: «Cuando entras en la iglesia la primera impresión es de que solo hay un ventanal al fondo». Este lugar se convierte en un punto de interés tanto por su historia como por la curiosidad que genera en los visitantes. Si bien algunos la consideran interesante, otros la encuentran un poco decepcionante. Sin embargo, la singularidad de la huella del Diablo la convierte en un atractivo imperdible en Múnich.
Estatua de Julieta, por Virtu La Estatua de Julieta , ubicada frente al Antiguo Ayuntamiento de Múnich , es un encantador punto de interés que atrae la mirada de los visitantes. Esta hermosa representación de Julieta, protagonista de la célebre obra de Shakespeare, fue un regalo de la ciudad de Verona, con la que Múnich está hermanada. Virtu destaca un detalle entrañable al mencionar que «la chica portaba una flor natural en la mano regalo de algún desconocido», reflejando el espíritu romántico que rodea la figura.
La leyenda local añade un toque especial a la experiencia de la estatua. Inés Chueca narra que «si las mujeres regalan una flor a Julieta, encontrarán el amor», mientras que los hombres deben tocarle el pecho para recibir buena suerte en sus propias búsquedas románticas. Este pequeño ritual se ha convertido en una tradición, y muchos hombres parecen «tomarse muy en serio la leyenda», creando una atmósfera mágica en este sitio. Visitar la Estatua de Julieta no solo es una oportunidad para admirar una obra de arte, sino también para sumergirse en el romanticismo que envuelve la historia de amor más famosa de la literatura.
Estatua de Bavaria, por Azzonzo La Estatua de Baviera , situada junto al famoso recinto del Oktoberfest, es una imponente escultura de bronce que simboliza la fuerza y el espíritu de la región. Con 18.52 metros de altura y un peso de 87.36 toneladas, representa a la patrona de Baviera, conocida como bavarica Tellus. Encargada por el rey Luis de Baviera y creada por el escultor Ludwig von Schwanthaler, la estatua se erige como un homenaje a la gloria y determinación del pueblo bávaro.
Al caer la noche, la figura resplandece con su iluminación, convirtiéndose en un espectáculo aún más cautivador. Como destaca un viajero, «siempre iluminada de noche, se puede disfrutar de ella cualquier día». Acceder a su interior es otra experiencia que no te puedes perder; subir los 66 escalones de la escalera de caracol permite admirar la belleza de Múnich desde lo alto. La estatua, con su corona de laurel en lugar de un gigantesco pretzel o una jarra de cerveza, es también un símbolo de libertad , como mencionan los visitantes que la describen como «una diosa pagana» que “hace tributo cada año”. La Estatua de Baviera es, sin duda, un lugar que merece ser explorado durante cualquier visita a la ciudad.
Statua a Sigi Sommer, por Ciro La estatua a Sigi Sommer se encuentra en el corazón de Múnich , específicamente en la Rosenstraße, y representa a un reconocido periodista y escritor bávaro que dejó una huella profunda en la cultura local. Desde su instalación en 1998, esta escultura se ha convertido en un punto de referencia que resulta interesante pasar por alto mientras se camina hacia Marienplatz.
El viajero Álvaro Garrido García menciona que es «una estatua de un famoso actor bávaro», destacando la conexión cultural que tiene el monumento con la historia de la ciudad. Ciro , por su parte, aporta un contexto significativo al señalar que «esta estatua, en memoria del famoso periodista, ha estado presente desde 1998» y subraya la relevancia de Sigi Sommer como «der Grantler», conocido por su carácter cínico y la crítica mordaz que plasmaba en sus artículos.
Este monumento no solo rinde homenaje a un personaje singular de la historia de la ciudad, sino que también actúa como un recordatorio de la fuerza de la crítica social en la literatura. La figura en bronce, que parece estar caminando, invita a los transeúntes a reflexionar sobre el legado cultural de Múnich y el impacto duradero de sus personajes icónicos .
Estatua de Hermes, por Cristina E Lozano La Estatua de Hermes se erige en Múnich como un homenaje singular al mensajero de los dioses del Olimpo. Situada a unos pocos cientos de metros de Marienplatz, esta escultura de bronce capta la atención de los visitantes gracias a su peculiar pose. Según una viajera, Hermes se presenta «haciendo equilibrios cual bailarina en puntas, como si estuviera a punto de despegar». Su postura desafía la gravedad y la lógica, ya que «de puntillas sobre su pie izquierdo, con la derecha haciendo una gacela», parece transmitir un mensaje enigmático al cielo.
Este rincón de la ciudad no solo es un deleite visual, sino que también invita a la reflexión sobre su simbolismo y su conexión con la mitología. Muchos viajeros se detienen a admirar la delicadeza del trabajo artístico y a sentir la energía que emana de esta figura mitológica. La estatua es perfecta para aquellos que buscan un poco de historia y cultura más allá de los lugares turísticos habituales, convirtiéndose en un punto de encuentro para los amantes del arte y la mitología en Múnich.
Múnich a ritmo cultural: arte, música y espectáculos Museo Pinakothek der moderne, por Ciro El Museo Pinakothek der Moderne , ubicado en Múnich, es un importante referente del arte contemporáneo y el diseño industrial. Este impresionante edificio, diseñado por el arquitecto Stephan Braunfels, destaca por su exterior de cimiento armado a la vista, creando un estilo «bruto» que atrae a los visitantes. La oferta del museo abarca más de 3,000 pinturas, 300 esculturas y una amplia gama de objetos de diseño, que incluyen desde coches hasta joyas.
Los viajeros elogian su diversidad. Un visitante señala que «la Pinakothek der Moderne ofrece una colección heterogénea,» lo que refleja su carácter ecléctico y la inclusión de distintas modalidades artísticas. La experiencia se complementa con un interior luminoso y una cafetería de diseño nórdico , convirtiendo el espacio en un lugar acogedor para disfrutar del arte y la arquitectura.
Otras opiniones resaltan su capacidad para inspirar. Una viajera menciona que es «inspirador y enorme,» y muchos consideran que es un refugio excelente para escapar del ajetreo cotidiano, convirtiéndose así en uno de los principales lugares de arte en Múnich.
Alte Pinakothek, por viagenscomguia La Alte Pinakothek es una de las tres galerías de arte más destacadas de Múnich, y es reconocida por su rica colección que abarca desde el siglo XIV hasta el XIX. Este museo es un verdadero tesoro, donde se pueden admirar obras maestras de grandes artistas como Rembrandt, Rafael, Rubens, Da Vinci y Botticelli. Un viajero destaca que «la falta de tiempo para visitar tantas obras maestras» es un desafío, pero también uno de sus mayores atractivos.
Aunque actualmente está en proceso de renovación, la Alte Pinakothek sigue abierta al público, ofreciendo acceso a parte de sus impresionantes colecciones. Los visitantes aprecian particularmente la sección dedicada a la pintura alemana y la notable representación de la pintura holandesa con obras de grandes maestros como Rembrandt. Un usuario menciona que «la pintura holandesa también se celebra a lo grande», lo que demuestra la diversidad y riqueza del museo. Además, el edificio en sí es una obra arquitectónica hermosa que complementa la experiencia de exploración artística. La entrada es gratuita los domingos, lo que brinda una oportunidad perfecta para disfrutar de este maravilloso lugar.
Deutsches Museum, por Carlos Barroso Llamas El Deutsches Museum , ubicado en una isla del río Isar , es el museo de ciencia y tecnología más grande del mundo y un lugar imprescindible para cualquier visitante de Múnich. Con más de 17,000 piezas que abarcan desde un reloj de sol hasta un transbordador espacial, este vasto espacio invita a explorar cada rincón. juan luis garitaonandía adán destaca lo sorprendente que es “dedicar un minuto a cada pieza expuesta” y señala que “se tardarían… ¡36 días!” en ver todo lo que ofrece. Para los que buscan una visita intensa , Carlos Barroso Llamas recomienda reservar un día entero para disfrutar del museo.
La inmersión en el mundo de la ciencia es total, con secciones dedicadas a temas como la ingeniería, la aviación y la física. El viajero biens otorgando su experiencia menciona que “si lleva niños, apunta a dos días”, gracias a la riqueza y diversidad de las exposiciones. AnnaMeo resalta que el museo es “realmente enorme” y que las exposiciones son “claras y siempre bien explicadas”. Una visita al Deutsches Museum promete ser una experiencia inolvidable y educativa para todos.
Haus Der Kunst, por Marie & Matt Haus Der Kunst es un espacio fascinante que invita a explorar el arte contemporáneo en Múnich . A pesar de su oscura historia como edificio construido durante el régimen nazi, ha sabido transformarse en un centro cultural moderno. Marie y Matt destacan que «él fue capaz de ponerse al día como dardo estándar transformó en galería moderna», lo que demuestra cómo este lugar ha superado su pasado.
El viajero menciona que durante su visita pudieron disfrutar de tres exposiciones y un video permanentemente bajo tierra, lo que añade una capa de profundidad y reflexión a la experiencia. Aunque «un lugar cargado de malos recuerdos», como se expresa en la reseña, Haus Der Kunst se ha consolidado como un componente esencial del patrimonio de Múnich, proporcionando una mirada única a la complejidad de la historia de Alemania.
El ambiente único de la galería, combinado con sus exposiciones innovadoras , crea un espacio donde el arte y la memoria se entrelazan de manera impactante, haciendo de Haus Der Kunst un destino imperdible para quienes buscan comprender mejor la ciudad y su legado.
Teatro de Munich, por Marie & Matt El Teatro de Múnich , un emblemático edificio que no pasa desapercibido, es un espacio que combina historia y arte escénico en una ciudad vibrante. La estructura, rodeada por una plaza que a menudo alberga conciertos y grandes reuniones, se presenta imponente con su arquitectura de columnas de piedra y leones guardianes. La viajera Marie & Matt comentan sobre su experiencia, destacando que «la plaza principal también se utiliza a menudo para conciertos o grandes reuniones», lo que añade un aire de vida y energía al lugar. Aunque algunas secciones del teatro estaban en obras durante su visita, esto no resta encanto al edificio, que sigue siendo un referente cultural en Múnich . Es un sitio donde el arte se encuentra con la vida urbana, ofreciendo una atmósfera única para disfrutar de una experiencia teatral. Sin duda, el Teatro de Múnich invita a los viajeros a sumergirse en su ambiente, donde la historia y la modernidad se entrelazan.
Recorriendo la historia moderna y la innovación Rascacielos de BMW, por malclown El Rascacielos de BMW , erigido en 1973 por K.Schwanzer, es un símbolo arquitectónico que representa la innovación y la historia de la marca en Múnich. Este impresionante edificio, que simula un motor de cuatro cilindros, alberga las oficinas comerciales de BMW y es resultado de una época de transformación para la empresa. El viajero malclown destaca que «cualquiera que entre en esta fábrica puede elegir su coche a su medida» y añade que la experiencia de ver cómo se fabrica el vehículo es única. Adyacente al rascacielos se encuentra el Museo BMW , donde se ofrece un recorrido a través de la historia de la marca. Juan Manuel Sole señala que el museo destaca «una vasta colección de autos de época» y expone «los éxitos deportivos obtenidos, publicidades y motores de la firma», ofreciendo una experiencia inmersiva tanto en la historia del automóvil como en la de BMW.
Además, el museo ha sido renovado recientemente, aumentando su superficie de exhibición y mejorando la forma de presentar las piezas. Esto hace que la visita sea aún más atractiva para los entusiastas del motor. La posibilidad de contar con guías que den información detallada sobre la historia de BMW hace la visita aún más enriquecedora. Un detalle curioso es la inclusión de una guardería para los niños de los compradores, lo que suma un plus a la experiencia familiar en este emblemático lugar de Múnich.
Museo BMW, por Enrique Alapont Asins En el corazón de Múnich , el Museo BMW , conocido también como BMW Welt, es un lugar imprescindible para los entusiastas del automovilismo. Este impresionante edificio moderno se erige junto a la sede mundial de la marca y el Olympiapark, convirtiéndose en un centro multifuncional que atrae a visitantes de todo el mundo. Diana Patricia Montemayor Flores destaca que aquí se tiene «la oportunidad de acercarse a los últimos modelos de automóviles», donde los visitantes pueden interactuar con los vehículos, tocar sus interiores y capturar los momentos con fotografías.
La experiencia en el museo va más allá de la simple exhibición de coches, ya que también incluye una tienda con productos de la marca, como ropa y accesorios. Enrique Alapont Asins lo describe como «el principal concesionario de BMW «, un reflejo del diseño vanguardista que caracteriza al siglo XXI. Claudia Alvarez también resalta la magnitud del lugar, afirmando que es «gigante y muy interesante de conocer». Para quienes aman los automóviles, el Museo BMW no solo ofrece una mirada fascinante a la historia y la innovación de la marca, sino que también promete una visita que no se olvidará fácilmente.
Olympiapark, por Enrique PJ Olympiapark es un lugar fascinante en Múnich, ideal para aquellos que buscan disfrutar de actividades al aire libre y de impresionantes vistas de la ciudad . Enrique PJ destaca que es un «fantástico parque olímpico en la ciudad, ideal para conocer, pasear, practicar actividades deportivas y mucho más.» Además, cerca de este espacio se encuentra el Museo de BMW , una recomendación que no se deben perder los visitantes.
Desde el parque, las vistas son simplemente espectaculares. Laura Chavero menciona que «desde allí se ve toda la ciudad», subrayando la belleza de dar un paseo y subir a la torre, lo que permite apreciar Múnich desde una perspectiva única. Virtu aporta una sorpresa adicional, señalando que el parque alberga un «paseo de la fama » que rinde homenaje a deportistas y artistas.
Para quienes desean disfrutar del entorno natural, Rachel White resalta que es «una buena zona para pasear y apreciar las vistas desde lo alto de la colina», construida sobre las ruinas de la Segunda Guerra Mundial. Miguel Gómez Liste recomienda el parque, indicando que es «perfecto para pasear» y que en verano se celebra el festival Tollwood, un evento cultural que atrae a muchos. Sin duda, Olympiapark ofrece una experiencia rica y variada, convirtiéndolo en un destino imperdible en Múnich.
Vila Olímpica Munique, por Claudia Cristina La Vila Olímpica de Múnich , levantada en 1972 para albergar a los atletas de los Juegos Olímpicos, es un lugar que, a pesar de su historia trágica, ha trascendido para convertirse en un tranquilo vecindario. Claudia Cristina destaca que este sitio, que albergaba a 16 mil personas, es irrevocablemente recordado por el atentado del grupo palestino Septiembre Negro, que dejó una marca indeleble en la memoria colectiva. Al acercarse a la Vila, los visitantes pueden apreciar una placa a la entrada del ex alojamiento , donde se recuerdan los nombres de los atletas israelíes asesinados. Aun así, el viajero podrá disfrutar de la paz y la serenidad del entorno actual, donde los residentes disfrutan de un clima apacible rodeados de amplias zonas verdes. La belleza del parque olímpico cercano complementa la experiencia, haciendo de la Vila Olímpica un lugar que invita tanto a la reflexión como al disfrute del espacio natural, mostrando la capacidad de la humanidad de transformarse y sanar.
Torre Olímpica, por Claudia Cristina La Torre Olímpica de Múnich , inaugurada en 1972 para los Juegos Olímpicos, se erige como uno de los símbolos más emblemáticos de la ciudad. Con una altura de 291,28 metros, es la torre de televisión más alta de Alemania y ofrece a los visitantes una experiencia inolvidable. Asciende en un cómodo ascensor hasta la plataforma de observación a 190 metros de altura, donde «las vistas de la ciudad y el parque, en particular, son muy hermosas», como menciona una viajera. Desde allí, se puede disfrutar de una panorámica impresionante del Parque Olímpico y sus alrededores.
Además de las vistas, la torre cuenta con un bar donde se puede degustar una bebida mientras se contemplan los paisajes urbanos. También alberga un pequeño museo del rock and roll , añadiendo un toque cultural a la visita. Aunque el precio de acceso no es el más económico, el viajero Ciro aconseja que “si eliges visitar el parque, tiene sentido no dejar de subir a la torre para disfrutar de su magnífica vista”. Sin duda, la Torre Olímpica es un imperdible para todo aquel que busque una perspectiva única de Múnich .
Deporte y pasión: escenarios que laten con el fervor bávaro Allianz Arena, por Un Mundo Para 3 El Allianz Arena es un punto de referencia impresionante en Múnich, que fascina tanto a aficionados del fútbol como a turistas curiosos. La modernidad de su diseño, inaugurado en 2005, se destaca gracias a su exterior conformado por más de 2.800 paneles que pueden iluminarse en diferentes colores. Como dice un viajero, «merece la pena visitarlo» incluso si no hay un partido en juego, ya que su iluminación nocturna es espectacular.
Dentro del estadio, la experiencia puede ser aún más enriquecedora. Realizar un tour guiado permite descubrir el terreno de juego, los vestuarios y el túnel por donde los jugadores salen al campo. Un usuario comenta que el recorrido es «una visita normal de un estadio de fútbol», donde el guía amablemente proporciona información en varios idiomas.
Los visitantes también destacan la importancia de planificar con antelación, pues «adquirir entradas para partidos es recomendable hacerlo con antelación». De esta manera, se puede disfrutar de la atmósfera vibrante del fútbol en uno de los estadios más modernos de Europa, que ofrece una experiencia visual y cultural única. Sin duda, el Allianz Arena es una visita obligada al explorar Múnich más allá de lo icónico.
Estadio Olímpico - Olympiastadion, por Diana Patricia Montemayor Flores El Estadio Olímpico de Múnich , una obra maestra diseñada por Frei Otto, es un símbolo de la ciudad que rebosa historia y anécdotas. Construido para los Juegos Olímpicos de 1972 , este impresionante recinto ha sido testigo de eventos memorables, incluida la Copa Mundial de Fútbol de 1974. La viajera Diana Patricia Montemayor Flores destaca la experiencia única de «trepar por su techo «, donde se ofrecen tours durante dos horas que permiten caminar sobre las cornisas y disfrutar de actividades emocionantes como el rappel y la tirolesa.
Los alrededores del estadio son igualmente cautivadores, con amplios espacios verdes, jardines y laguitos que invitan a dar un paseo. Maria Peiró menciona que «daba gusto pasear por allí», reflejando la belleza del lugar. Además, quienes se aventuran a explorar la zona pueden descubrir eventos inesperados; el viajero Virtu comparte que fueron sorprendidos por un concierto en el velódromo, lo que hizo su visita aún más memorable. Ya sea para realizar actividades al aire libre o simplemente disfrutar de la arquitectura, el Estadio Olímpico de Múnich es un destino que merece ser visitado, dejando una huella imborrable en sus visitantes.
Eisbachwelle, por Ciro Eisbachwelle es un lugar singular en Múnich, donde el surf se convierte en una extraordinaria experiencia en medio de la ciudad. Situada en el famoso Englischer Garten, esta ola artificial se ha convertido en un punto de encuentro para surfistas experimentados que desafían las olas del río Isar. El viajero Un Mundo Para 3 menciona que «si te gusta el surf, debes tener una técnica depurada ya que se practica en un trozo de río», lo que añade un desafío interesante a este deporte.
Incluso en días fríos, la acción no se detiene; como señala Alfredo Alcazar Padilla , es «impresionante ver como nevaba» y aún así había surfistas desafiando el frío. Ciro destaca la curiosidad que genera este lugar, afirmando que «nadie esperaría ver el buen surf en la ciudad». Los surfistas disfrutan de eliminar el vórtice creado por las corrientes a medida que buscan dominar esta ola única. Desde las orillas o el puente, los espectadores se maravillan con un espectáculo inusual que combina destreza y adrenalina. Greta Dealessi enfatiza que «aquí no se permiten los principiantes», subrayando la habilidad que requiere surfear en este entorno. Sin duda, Eisbachwelle es una experiencia que sorprende y emociona, perfecta para los amantes del deporte y quienes buscan algo diferente en Múnich.
Patinaje sobre hielo, por Cristina E Lozano El patinaje sobre hielo en Múnich es una experiencia festiva que encanta tanto a locales como a visitantes, especialmente durante la temporada navideña. Cristina E Lozano menciona que esta actividad es «bonita y para toda la familia», aunque reconoce que los precios pueden ser un poco elevados. Sin embargo, señala que «no es época de ser un tacaño» cuando se trata de disfrutar de las festividades.
La ciudad cuenta con varias pistas de hielo , como la del aeropuerto, el Olympiapark y la de Stachus, cerca de Marienplatz. Estas pistas ofrecen un ambiente animado, perfecto para deslizarse con gracia. Es importante tener en cuenta que la cantidad de patinadores puede ser considerable, así que conviene «procurar no dejar de deslizarse siempre en la misma dirección» para evitar colisiones inesperadas.
Para aquellos que prefieren observar, hay un bar con terraza en un piso superior, donde se pueden disfrutar «buenas vistas » del patinaje mientras se saborea una bebida caliente. Esto lo convierte en un plan ideal para relajarse tras una tarde de actividades en la pista . Múnich, con su oferta de patinaje sobre hielo, es un lugar donde la diversión y la calidez de las festividades se combinan para crear recuerdos inolvidables.
Lago del Olympiapark, por Diana Patricia Montemayor Flores El Lago del Olympiapark , ubicado en Múnich, es un espacio que invita a disfrutar de la naturaleza y la tranquilidad. Este lago, construido para los Juegos Olímpicos de 1972, es uno de los destinos más apreciados por familias y visitantes, especialmente durante los fines de semana. Diana Patricia Montemayor Flores destaca que es «un sitio atractivo para recorrer su orilla a pie, en bicicleta, en patines». Además, es posible alquilar botes o canoas para explorar sus aguas, lo que permite observar a los pájaros que se acercan a beber y disfrutar de la belleza del paisaje que combina prados verdes y cielo azul.
Ciro complementa esta experiencia al describir el entorno como «pura relajación», ideal para descansar, hacer un picnic y jugar con los más pequeños. El lago está rodeado de vegetación y ofrece instalaciones deportivas que recuerdan los Juegos Olímpicos, haciendo del lugar un refugio perfecto para quienes buscan un descanso en un entorno natural. Sin duda, el Lago del Olympiapark es un rincón que no hay que perderse al visitar Múnich.
Múnich se revela como un destino lleno de sorpresas que trascienden los lugares emblemáticos. Su mezcla de historia, cultura y naturaleza invita a los viajeros a descubrir rincones inexplorados y experiencias auténticas . Desde los vibrantes mercados hasta los impresionantes parques y museos, la ciudad ofrece una riqueza que la convierte en un lugar donde cada visita puede ser única y memorable.