Oña

Descubre Oña: lugares que ver en un entorno medieval único

23 Septiembre 2025

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Gonzalo Moreno

La Mesa de Oña es una especie de meseta situada a unos 1200 metros. El acceso se encuentra rodeado de laderas lo que dificulta un pelín la última parte de la ascensión, por un lado, y hace que las vistas sean espectaculares, por otro.

Saliendo desde Oña, se tardan alrededor de 1 hora y...

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Oña Milenaria

En lo que antiguamente fueron los jardines benedictinos del monasterio de san Salvador, se encuentra esta exposición de arte contemporáneo en la que 34 artistas muestran sus trabajos en diversas disciplinas: fotografía, escultura, pintura, artes gráficas, etc. Por cuarto año consecutivo, los paseos...

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Esta fantástica ruta sale a la izquierda de la carretera de Oña justo en la localidad de Barcina de los Montes y está marcada con tablillas (PR.BU-5). El itinerario, que forma parte del más extenso sendero “Raíces de Castilla” (43 kilómetros) y enlaza Oña, Frías y Poza de la Sal, en este tramo puede...

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Un viaje evocador por la historia y el enigma de Oña

Monasterio de San Salvador, por SerViajera

1. Monasterio de San Salvador

El Monasterio de San Salvador, situado en Oña, es un espléndido ejemplo del legado cultural de la región. Fundado por el conde Sancho García, este monasterio tiene una rica historia que se remonta a la época medieval, siendo un referente en la vida monástica y cultural de la España de antaño. Según un viajero, «la iglesia de San Salvador es un gran museo, impactante por sus joyas y sus reliquias», lo que da cuenta de la importancia histórica y artística del lugar.

La arquitectura del monasterio es un atractivo por sí misma. A lo largo de los siglos, ha experimentado diversas transformaciones, que van desde su origen como fortaleza con detalles románicos hasta su espectacular fachada barroca. Actualmente, la iglesia, de acceso restringido, puede ser visitada con guía previa cita. SerViajera destaca que «todo en él asombra», desde los retablos policromados hasta el claustro gótico, convirtiendo cada rincón en un espacio digno de admiración.

Ubicado en un entorno natural espectacular y rodeado de senderos ideales para disfrutar del aire libre, Oña ofrece un panorama único que complementa la visita al monasterio. Con su historia y su belleza, el Monasterio de San Salvador es una parada obligada para los viajeros que buscan sumergirse en la rica tradición de esta localidad. Patricia Barrero Romero opina que «merece la pena pasar a la iglesia Abad Acial», y es un consejo que no debe pasarse por alto al explorar Oña.

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Publicado en Monasterio de San Salvador

Diez siglos después de que Oña fuera reducto celta, nació una niña llamada Tigridia. Su padre, el poderoso Don Sancho García, Conde de Castilla, decidió inmediatamente su destino: La pequeña sería monja, así que realizó grandes donaciones para la fundación del Monasterio de Oña, el que entregó como dote a su hija dulcísima. La infanta convirtióse ... ver más

Iglesia de San Juan Bautista, por ANADEL

2. Iglesia de San Juan Bautista

La Iglesia de San Juan Bautista es una joya de la arquitectura románica ubicada en Oña, un lugar que destaca por su historia y encanto medieval. Situada en la plaza del ayuntamiento, su construcción se realizó entre los siglos XII y XVI, lo que la convierte en un testimonio apasionante del pasado de la localidad. La viajera ANADEL destaca su belleza al mencionar que es «preciosa iglesia de factura románica algo escondida» en este pintoresco entorno.

Al entrar, los visitantes pueden admirar el imponente Calvario medieval que preside el interior de la iglesia. Además, se encuentra el arco de la Estrella, el resto más significativo de la muralla de Oña, situado a la derecha del Calvario. Este elemento añade un valor histórico inestimable al lugar, permitiendo a los viajeros conectar con la rica herencia de Oña. La torre de San Juan, también restaurada, se alza junto a la iglesia, contribuyendo al atractivo visual del conjunto.

La iglesia de San Juan Bautista no solamente ofrece un viaje al pasado, sino que es un lugar perfecto para disfrutar de la paz y la belleza que ofrece el entorno medieval de Oña.

Arco del Estrella, por ANADEL

3. Arco del Estrella

El Arco del Estrella es una de las huellas más palpables del pasado medieval de Oña, y su preservación ha permitido que los visitantes se sumergen en la historia de esta localidad. Este emblemático acceso, que forma parte del antiguo recinto amurallado, era fundamental para delimitar los derechos de vecindad y era testigo del bullicio y el comercio que una vez caracterizaron a la zona. La viajera ANADEL destaca que «se conserva del antiguo recinto amurallado de Oña» y resalta su importancia histórica como punto de conexión con el pasado de la ciudad.

El Arco del Estrella no solo es un atractivo arquitectónico, sino que también remite a una época en la que Oña albergaba una próspera judería, establecida en sus inmediaciones desde 1291 hasta el siglo XV. Esta comunidad trajo consigo un auge comercial que enriqueció a la localidad. La experiencia de la viajera pone de manifiesto que «su estancia atrajo comercio y riqueza a la localidad», lo que añade un matiz fascinante al visitar este monumento. Al pasear por el Arco del Estrella, los visitantes no solo contemplan una obra maestra del patrimonio, sino que también sienten la historia latente de un lugar que fue, y sigue siendo, un cruce de culturas y tradiciones.

Paisajes secretos y rincones de naturaleza para desconectar en Oña

Ruta hacia el Pico Cuchillos (PR.BU-5), por SerViajera

4. Ruta hacia el Pico Cuchillos (PR.BU-5)

La ruta hacia el Pico Cuchillos (PR.BU-5) ofrece una experiencia única que combina la belleza natural con la historia medieval del entorno de Oña. La travesía comienza en Barcina de los Montes y se encuentra debidamente señalizada, facilitando el acceso a los senderistas. Según el viajero SerViajera, «el itinerario, que forma parte del más extenso sendero ‘Raíces de Castilla’, se puede hacer a pie o en todoterreno».

A lo largo de los 14 kilómetros de este espectacular trayecto, se puede disfrutar de paisajes sobrecogedores como el camino de cornisa que serpentea por la Sierra de Oña. El viajero destaca el «panorama impresionante» que se contempla desde la cumbre, una vista que se eleva sobre montañas y hayedos, creando una sensación de inmensa soledad y conexión con la naturaleza. Durante la ruta, la tranquilidad es palpable, con pocos encuentros, uno de ellos con un local que le mostró «perrochicos», las deliciosas setas de la zona. Esta experiencia en el Pico Cuchillos invita a absorber la tranquilidad y revelarse ante la majestuosidad de la naturaleza.

Mesa de Oña, por Gonzalo Moreno

5. Mesa de Oña

La Mesa de Oña es una impresionante meseta situada a aproximadamente 1200 metros de altitud, rodeada de laderas que, aunque complican un poco la ascensión, ofrecen vistas espectaculares. Un viajero menciona que «saliendo desde Oña, se tardan alrededor de 1 hora y media en llegar arriba», aunque es recomendable ir acompañado de alguien que conozca la zona. Una vez en la cima, los panoramas son realmente deslumbrantes: al norte se puede ver la cordillera cantábrica y al sur, el característico paisaje de La Bureba. La experiencia se complementa con la posibilidad de observar buitres en vuelo a pocos metros, lo que añade un toque único a la visita.

El entorno de la Mesa de Oña forma parte de un Parque Natural, lo que destaca por su rica flora y fauna. Gonzalo, un viajero, menciona que «la cantidad de enebro que te encuentras en el camino hacia la mesa» es notable, y también tuvo la suerte de avistar un corzo. Aunque la dificultad del camino es baja, se advierte que «la última parte se complica un pelín», siendo escarpada y con riesgo de resbalones. Este paraje no solo ofrece una caminata gratificante, sino también una conexión profunda con la naturaleza en un paisaje medieval único.

El Jardín Secreto, por Oña Milenaria

6. El Jardín Secreto

El Jardín Secreto de Oña es un espacio mágico que invita a disfrutar de la tranquilidad y la belleza de un entorno medieval. Los visitantes elogian su atmósfera única, donde el arte contemporáneo se fusiona con la historia. Una viajera destaca que se trata de «una exposición de arte contemporáneo en lo que antiguamente fueron los jardines benedictinos del monasterio de san Salvador». Este lugar alberga las obras de 34 artistas que despliegan su creatividad a través de diversas disciplinas, como fotografía, escultura y pintura.

El Jardín Secreto permite pasear por los paseos abaciales y la piscifactoría del siglo XVI, creando un contraste fascinante entre la tradición y las últimas vanguardias artísticas. Un usuario menciona que «los paseos abaciales y la piscifactoría del siglo XVI comparten espacio con las últimas vanguardias artísticas», lo que resalta la singularidad de este lugar. Este rincón de Oña es ideal para los amantes del arte y la historia, y ofrece una experiencia que enriquece el espíritu y estimula la creatividad.

Balcón de Oña, por ANADEL

7. Balcón de Oña

El Balcón de Oña se presenta como un mirador excepcional en el corazón de un entorno medieval cautivador. Un viajero recuerda con nostalgia el pasado de la ciudad, mencionando que en el siglo XI, Sancho García eligió este lugar para establecer la Abadía del Salvador, lo que trajo prosperidad a la región. A lo largo de los años, su historia ha estado marcada por episodios tristes, como la ocupación napoleónica y su uso posterior como hospital psiquiátrico. Sin embargo, este mirador ofrece un respiro de belleza en medio de esos recuerdos.

Ana del destaca la paz que se respira en los jardines del monasterio adyacente, que están cuidados con esmero y son un lugar ideal para pasear. El Balcón de Oña proporciona vistas panorámicas sobre la localidad y parte de la abadía, complementado con un panel informativo que explica cada rincón visible del paisaje. El viajero añade que hay bancos dispuestos para que los visitantes puedan contemplar tranquilamente estas vistas, haciendo del Balcón un sitio perfecto para disfrutar de la tranquilidad y la belleza de Oña.

Viajeros recomiendan Oña

Oña, situada en la provincia de Burgos, es una villa que transporta a sus visitantes en el tiempo. Con su esencia medieval intacta, es un lugar donde «callejear por Oña es trasladarnos muchos siglos atrás», tal como señala un viajero. La plaza principal es un punto destacado, dominada por la imponente Abadía del Salvador, que alberga un hermoso claustro de principios del siglo XVI y que solo se puede visitar mediante guías.

Además de su riqueza histórica, Oña no escatima en belleza natural. Desde el pueblo, los amantes del senderismo pueden explorar las maravillas cercanas, como el Desfiladero de la Horadada, un paraje de bosques que invitan a la aventura. «Buenos paisajes, buena gastronomía y mejores personas», añadió un visitante, resaltando la calidez de la comunidad local.

Para quienes buscan una experiencia completa, una visita a Poza de la Sal es imprescindible, con sus encantadoras callejuelas y un castillo que data del siglo XIV, lo que convierte a Oña en un destino ideal para disfrutar de un entorno medieval único.

Oña se revela como un destino inigualable, donde la historia medieval se entrelaza con la naturaleza y la cultura. Desde su impresionante monasterio hasta los tranquilos jardines, cada rincón ofrece una experiencia única. Disfrutar de sus paisajes y monumentos invita a una exploración más profunda, creando recuerdos imborrables en un entorno que ha sabido preservar su esencia.