Hotel O Val Do Naseiro

Pasamos cuatro dias en Viveiro y nos hospedamos en este hotel, mi marido, mi hija de 2 años y yo. La limpieza es fantástica, el buffet del desayuno de calidad. Nos gusto mucho la piscina (no es climatizada pero a nosotros no nos importo). La habitación muy amplia. Tienen servicio de comidas y cenas si decides quedarte a cenar como hicimos nosotros dos noches. Muy buena la comida y variada. El precio es muy correcto. El personal que nos tocó muy servicial con nosotros. Tenian tronas para la niña. La habitación que nos dieron en la primera planta era muy silenciosa. También es verdad que me aseguré previamente que no celebraban ninguna boda esos dias.

Lo más asombroso de este hotel, es que entre su estilo "neo" y el entorno, parece más un balneario que otra cosa. Y podría ser perfectamente. Para mantener el silencio, el corte de la hierba, se lo dejan a los animales, ya que se pueden ver pastando caballos y ovejas, con lo que se evita el molesto ruido del corta-césped. Una reproducción de un molino, piscina acristalada y una terraza para tomar una cerveza al atardecer son motivos más que suficientes para hacer de este hotel, un lugar perfecto para el descanso.
El interior, años 70, cumple con sobrada dignidad las condiciones de higiene, grandes espacios y habitaciones realmente cómodas. Buffet muy completo y bien presentado y una más que amable atención por parte del personal, completan la oferta.

Hotel con encanto situado en el bonito valle de Naseiro a 3 km de la localidad de Viveiro.
El hotel dispone de 41 habitaciones equipadas con baño completo, secador de pelo, TV vía satélite, hilo musical y minibar. También tiene piscina climatizada.
A pocos kilómetros del hotel se encuentra en medio de un precioso paraje natural, el Souto da Retorta con eucalitos centenarios y la popular cascada llamada El Pozo da Ferida.

Para vacaciones en familia ideal.
Personal muy atento.
Limpieza perfecta.
Habitaciones anticuadas pero mas que correctas.
En entorno, ideal para desconectar y disfrutar de la naturaleza.
Buffet desayuno variado.
Cocina variada y abundante

Las habitaciones muy silenciosas, amplio salón de lectura. El buffet desayuno muy variado, quizá eché en falta que no tuvieran cartelitos poniendo qué era cada cosa. Habitaciones con moqueta, esto no me gustó pero es una manía personal. Todo muy limpio.