Fiestas de Gante
Durante 10 días en julio Gante es una fiesta. Una fiesta ordenada como corresponde a la civilizada Flandes pero un fiestón. Solo hay que ver el programa de fiestas para un día cualquiera; multitud de actividades y conciertos, tantos que es imposible pasear por la ciudad sin oír música. Veías escenarios por cualquier lugar con el único condicionante de que la música no se tapara la una a la otra. Me llamó la atención que, cerca de grandes escenarios, una chica se había puesto a tocar su flauta en medio de la calle; no tenía cestito para las monedas ni tenía pinta de vivir de ello, más bien solo quería aportar su granito de arena a que su ciudad fuera la más agradable bonita de Bélgica, con el permiso de Brujas.