Rincones ocultos de Aquitania que te sorprenderán
Aquitania esconde numerosos rincones que cautivan a los viajeros que se aventuran más allá de los destinos turísticos tradicionales. Entre ellos, se encuentra la isla de Lège-Cap-Ferret, un paraíso natural con playas salvajes y un ambiente tranquilo. También merece la pena visitar la localidad medieval de Saint-Émilion, famosa por sus viñedos y su arquitectura histórica. En los Pirineos Atlanticos, los pintorescos pueblos de Saint-Jean-Pied-de-Port y Sare ofrecen un viaje en el tiempo con sus calles adoquinadas y casas de tonos pastel. Estos lugares, junto a otros secretos menos conocidos, hacen de Aquitania un destino sorprendente y lleno de encantos por descubrir.
Tren cremallera de Larrun, por Turiscapadas
Un paseo por Sarlat, por Manuel Camacho
Callejones de Tourny, por Chloé Balaresque
Pirineos francés tren de artus, por joaquin baron
La Bastide-Clairence, por Turiscapadas
Funicular de Pau, por mmozamiz
Los pimientos de Espelette, por Turiscapadas
Vieja fuente, por Turiscapadas
Capbreton, por e_bgd
Urrugne, por izka
TGI, por PETERSEN christel
Puente de Larrau, por Silvia del Moral
Aquitania se revela como un destino fascinante, donde cada rincón cuenta su propia historia. Desde la impresionante vista del tren cremallera de Larrun hasta la belleza medieval de Sarlat, la región cautiva por su riqueza cultural y su autenticidad. Disfrutar de sus pequeñas joyas, como La Bastide-Clairence y los pimientos de Espelette, promete una experiencia inolvidable en un viaje lleno de sorpresas.