Calles emblemáticas de Orihuela que no te puedes perder Orihuela esconde calles que son auténticas joyas por descubrir. La Calle Mayor es una de las más significativas, repleta de historia y encanto, donde se pueden encontrar edificios emblemáticos como la iglesia del Salvador. Otro lugar destacado es la Calle de la Caridad , con su ambiente bohemio y artístico. En la Calle de la Virgen de la Huerta , se respira tradición y cultura. Estos rincones son perfectos para pasear y disfrutar de la esencia de la ciudad.
Calle Mayor de Ramón y Cajal, por Guillermo García
La Calle Mayor de Ramón y Cajal es un verdadero corazón pulsante del casco histórico de Orihuela. Este rincón emblemático combina a la perfección el pasado y el presente, ofreciendo a los visitantes una experiencia vibrante llena de vida . La viajera Mariola Navarro Caselles lo describe como "espectacular", resaltando la riqueza de su entorno, donde se encuentran tiendas, bares, palacios y, por supuesto, la imponente catedral. Este ambiente animado no solo atrae a los turistas, sino que también se convierte en un lugar de encuentro para los oriolanos.
El arte urbano también hace acto de presencia en la calle, creando un contraste fascinante con la arquitectura gótica levantina de la catedral. Guillermo García comparte su apreciación por esta mezcla, al mencionar que la combinación entre lo gótico y lo urbano "me encantó". La Calle Mayor de Ramón y Cajal, con su oferta cultural y artística , invita a los viajeros a explorar sus rincones y disfrutar de su atmósfera única. Sin duda, es un recorrido obligado para quienes deseen descubrir los encantos de Orihuela .
Ruta del miedo de Orihuela, por Victor Navarro
La Ruta del miedo de Orihuela es una experiencia fascinante que transporta a los viajeros a un mundo lleno de misterios y leyendas. Según el viajero Victor Navarro , esta ciudad antigua "es ciudad de misterios y apariciones", donde "en las noches oscuras" se puede sumergir uno en un ámbito mágico, donde las sombras parecen cobrar vida. La energía de los lugares visitados se siente poderosa y atrayente, haciendo que los sentidos se agudicen a medida que se exploran los rincones de la ciudad.
Mariola Navarro Caselles también destaca que esta ruta es "perfecta" para quienes desean conocer lo más intrigante de Orihuela, enfatizando el valor de contar con un guía "número 1". La combinación de historia, misterio y un toque de terror se unen en este recorrido, ofreciendo a los participantes la oportunidad de vivir una experiencia única e inolvidable. Así, la Ruta del miedo se convierte en una visita imprescindible para aquellos que se atrevan a explorar el lado enigmático de esta hermosa ciudad.
La Cuesta del Seminario es un encantador recorrido que invita a los visitantes a disfrutar de una experiencia única en Orihuela . Este camino, que serpentea con suaves curvas, lleva a los viajeros hacia el Seminario y el Castillo, brindando a su paso vistas extraordinarias de la ciudad . Manuel Sola Pérez resalta que "la cuesta que da subida al Seminario y al Castillo de Orihuela, donde se puede contemplar unas extraordinarias vistas", destaca la belleza del paisaje desde esta altura.
Además de sus impresionantes panorámicas, la Cuesta del Seminario es un lugar perfecto para aquellos que buscan un poco de ejercicio al aire libre . Angela Ballesta lo describe como "un sitio fantástico en el que poder hacer ejercicio al aire libre". Al llegar al final de la cuesta, se recompensa con unas vistas espectaculares que hacen que la subida valga la pena. Este rincón mágico no solo ofrece un vistazo al rico patrimonio histórico de Orihuela, sino que también se convierte en un espacio ideal para desconectar y disfrutar del entorno natural.
El recorrido por las calles de Orihuela revela un universo arquitectónico repleto de historia y misterio. Desde la vibrante Calle Mayor de Ramón y Cajal hasta la enigmática Ruta del miedo, cada rincón narra relatos del pasado. La Cuesta del Seminario, con su encanto inigualable, invita a los visitantes a conectar con la esencia de esta ciudad única, donde cada paso resuena con la vida que le dio forma.