Un mal día lo tiene cualquiera
Mi experiencia en este local no fue todo lo agradable que esperaba.
El menú sobre el papel esta bien, pero no fué el caso. Fuimos 4 personas y cada uno pidió un plato diferente. El único que acertó fue el que pidió una pechuga de pollo. Los demás nos fuimos al pescado. Gran error. Solo añadir que la ¿merluza? empanada sabía a trasero de mandril del Zoo de Madrid.
Respecto a la camarera que nos toco, desagradable y despreocupada. No esperaba menos de ella. De hecho, ya no trabaja allí. Lógico.
El local en sí esta bastante bien. Espacioso y con una decoración decente.
Solo quiero romper una lanza en favor de este local: mucha gente me ha vuelto a hablar bien de este Restaurante.