DavidMM
Comer es un gran placer.
Ya lo dice el dicho popular. Y esta actividad alcanza su apogeo en San Sebastián, entre otras ciudades de la geografía española.
Este restaurante es clásico de Donostia. La comida está genial, pero sobre todo destaca la amabilidad del personal y especialmente de José Juan Castillo, atento, entrañable y encantador.
Recomiendo deleitarse con especialidades como el Salteado de verduras con bacalao confitado y las maravillosas Milhojas de calabacín con foie-gras y mollejitas