Isla de Fadiouth

Fadiouth es la isla de las conchas. Se llega desde el pueblito de Joal, en la costa de Senegal, al sur de Dakar. Es una isla plana, que está literalmente cubierta de conchas. Las calles están llenas, las paredes de las casas están cubiertas, todo lleva conchas por todos lados. Se rompen cuando las pisas, haciendo un ruido muy particular. Ahora, la isla es bastante turística, pero conserva un toque especial, tranquilo, se juega en la calle, los viejos están a la sombra debajo de los árboles contándose las historias del pueblo, se llega donde los vecinos a comer tieb bou dien, que significa arroz con pescado.

Este pueblo en realidad son tres: tres islas artificiales nacidas de la sedimentación de miles y miles de conchas de berberechos, de los que viven, recolectándolos de los manglares del río, (y algo del turismo, que empieza a acudir por lo peculiar de este lugar). Una isla es el pueblo en sí, único católico en una nación mayoritariamente musulmana y animista. Otra isla es el cementerio, unida al pueblo por un puente de madera. La última isla todavía no lo es propiamente, es un conjunto de chozas en alto, a modo de silos para el almacenamiento de alimentos. Al lugar sólo se accede por barca que, por supuesto, es muy fácil y barato de alquilar con guía.

Llegamos a la zona a primera hora de la mañana, y coincidió con la marea baja. Esto nos permitió ver una de las actividades principales de los habitantes de la isla y que es la que le da el nombre: la recogida de berberechos de la arena. Las mujeres se dividen en grupos y van llenando los cestos. Mientras, los niños disfrutan jugando al fútbol

Es una isla con mucho encanto, a la que yo no quería ir al principio por turística, pero que no pierde su esencia aunque tenga turistas, y si vas durante fiestas bailarás toda la noche danzas típicas senegalesas acompañada de tambores y gente acogedora.